Un funcionario de la Organización Mundial de la Salud dijo el lunes que sospechaba de la transmisión de humano a humano del nuevo coronavirus “desde el principio”, a partir del 31 de diciembre de 2019.
Pero los funcionarios de la OMS se hicieron eco de las autoridades chinas y negaron cualquier sugerencia de transmisión de humano a humano durante semanas después del 31 de diciembre. Se informó que los médicos chinos, mientras tanto, sabían desde semanas antes que el virus podía ser transmitido entre humanos.
“Desde el principio, desde la primera notificación que recibimos el 31 de diciembre, dado que se trataba de un grupo de neumonía -soy especialista en MERS, por lo que mis antecedentes son en coronavirus y gripe-, inmediatamente pensaron, dado que se trata de un patógeno respiratorio, que por supuesto podría haber transmisión entre humanos”, dijo la Dra. Maria Van Kerkhove en una rueda de prensa el lunes.
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A pesar de las aparentes sospechas de Van Kerkhove, la OMS repitió que las autoridades chinas minimizaban la posibilidad de que el virus se propagara entre las personas.
La OMS declaró repetidamente a principios y mediados de enero que los trabajadores sanitarios de Wuhan no se estaban infectando con el coronavirus, un indicador clave de la transmisión entre humanos.
Sin embargo, el médico de Wuhan, Lu Xiaohong, dijo al China Youth Daily que para Navidad ya había oído hablar de médicos que se habían infectado con el virus. El Wall Street Journal informó igualmente que los médicos chinos estaban al tanto de la transmisión de humano a humano del COVID-19 desde finales de diciembre, aunque las autoridades chinas censuraron a los que se manifestaron.
Además, un estudio de The Lancet encontró que para el 2 de enero, sólo 27 de los 41 pacientes con coronavirus confirmados en el laboratorio tenían conexiones con el mercado de mariscos de Huanan que se pensaba que era la fuente del brote.
Pero un comunicado de prensa de la OMS del 12 de enero dijo: “Basado en la información preliminar del equipo de investigación chino, no se ha reportado ninguna evidencia de transmisión significativa de humano a humano y ninguna infección de trabajadores de la salud”.
“En esta etapa, no hay infección entre los trabajadores de la salud, y no hay pruebas claras de transmisión de humano a humano”, continuó.
Ese comunicado de prensa llegó un día después de que Li Wenliang, el médico de Wuhan que las autoridades castigaron por advertir al público sobre el virus, se contagió con el virus.
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La OMS, que no devolvió una solicitud de comentario para esta historia, continuó afirmando que no había evidencia de que el virus pudiera ser transmitido por humanos.
“Hasta la fecha, no ha habido ninguna sugerencia de transmisión de humano a humano de este nuevo coronavirus”, dijo la OMS en un comunicado de prensa del 13 de enero. “No se han reportado infecciones entre los trabajadores de la salud, lo que puede ser un indicador temprano de la propagación de persona a persona”.
“Las investigaciones preliminares llevadas a cabo por las autoridades chinas no han encontrado pruebas claras de transmisión de humano a humano del nuevo #coronavirus (2019-nCoV) identificado en #Wuhan, #China”, la OMS twiteó el 14 de enero.
“Hasta la fecha, China no ha informado de ningún caso de infección entre los trabajadores de la salud o los contactos de los casos. Basado en la información disponible no hay evidencia clara de la transmisión entre humanos”, se lee en un comunicado de prensa de la OMS de ese mismo día.
También el 14 de enero, Van Kerkhove reconoció que “es posible que haya una transmisión limitada de persona a persona, potencialmente entre familias”, pero añadió: “está muy claro ahora mismo que no tenemos una transmisión sostenida de persona a persona”.
Para cuando la OMS reconoció la evidencia de la transmisión entre humanos, lo cual hizo el 22 de enero, los EE.UU. ya habían detectado su primer caso de coronavirus.
Fuente: Daily Caller
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