Una entidad humanitaria estadounidense desenmascara las estratagemas del régimen comunista chino frente al desastroso brote del virus del PCCh, surgido de su territorio.
Tanto las mentiras del régimen chino como sus violaciones de los derechos humanos y sus ambiciones de dominio, son expuestas por la reconocida organización Médicos contra la Extracción Forzada de Órganos (DAFOH), en el informe publicado el 5 de mayo.
DAFOH investiga desde hace décadas la criminal extracción forzada de órganos de los prisioneros de conciencia, perpetrada por el régimen chino para comercializarlos.
En su informe Desenmascarando la Pandemia COVID-19, DAFOH expone cómo el régimen chino permitió la difusión de la enfermedad, de lo que ha sido acusado por varios países.
Asimismo, relaciona que el régimen no informó adecuadamente de la amenaza a la Organización Mundial de la Salud (OMS, por la sigla en inglés) y se niega a que se investigue el origen y la evolución de esta crisis de la salud, en su territorio.
DAFOH también denuncia que el régimen chino se aprovechó de la pandemia del virus del PCCh, para manipular y debilitar aún más la autodeterminación de las naciones a las que ya había enganchado en su iniciativa de la Ruta de la Seda o “Belt and Road Initiative” (BRI, por la sigla en inglés).
Unos de los recursos que capitalizó para sus controvertidos fines fueron los equipos de protección personal (PPE, por la sigla en inglés), que acaparó en muchos países antes de declarar la gravedad del virus y de que este siguiera expandiéndose por las naciones que quedaron desprotegidas.
“Siguiendo una trayectoria de dividir y conquistar, o ‘divide y vencerás’, arruinando primero las asociaciones entre los países y apareciendo luego como el salvador que entregó las máscaras faciales a las regiones abrumadas”, así describe DAFOH las tácticas oportunistas aplicadas por el régimen comunista en esta ocasión.
Asimismo, la organización investigadora informó que el régimen chino vendió millones de PPE causando una impresión más de aversión que de alivio, porque millones de ellos fueron devueltos por defectuosos e inseguros.
DAFOH también desvela que la misma Cruz Roja China es utilizada por el régimen para impulsar su ideología comunista, e imponer a la empresa tecnológica Huawei como proveedora de las redes 5G y así obtener mayor control de los países que la acepten.
Igualmente, DAFOH reitera la que ha sido su misión durante los últimos 20 años, documentando y denunciando las atrocidades que sigue cometiendo el régimen chino con la extracción forzada de órganos humanos.
DAFOH recuerda que esos crímenes contra los practicantes de la antigua tradición espiritual Falun Dafa, los uigures y otras minorías étnicas y religiosas “no han recibido la respuesta internacional que esta situación merece”.
Más aún, la entidad alerta a todo el mundo sobre el riesgo de extinción que implica dejar que el Partido Comunista de China avance con su ideología, dado que sus líderes han expresado que no les importaría la desaparición de la mitad de la humanidad siempre y cuando los sobrevivientes fueran comunistas.
El informe de DAFOH concluye con una cita muy diciente de Chen Guangcheng, el respetado abogado chino de derechos humanos.
“El PCCh es el virus más grande y más grave de todos”.
Ary Alegre