Redacción Tierra Pura – Varios legisladores demócratas que mostraron su apoyo a las masivas protestas de Black Lives Matter a raíz de la muerte del afroamericano George Floyd ahora condenan la decisión del presidente Donald Trump de dar comienzo a las campañas por la presidencia, argumentando que podrían propagar el coronavirus.
Como indica Fox News, ante los eventos que se llevarán a cabo el próximo 19 de junio, los legisladores demócratas de las grandes ciudades no han ocultado su descontento y sus críticas se han amparado en las estrictas medidas de bloqueo en la contingencia del coronavirus pese a que ignoraron los mismos riesgos una vez que las protestas de Black Live Matters se propagaron en todo el país.
El jueves la representante demócrata por Florida, Val Demings dijo que el plan del presidente para celebrar manifestaciones en Florida y en otros lugares era irresponsable y egoísta, planteando un escenario de resurgimiento en los casos de contagio por el virus.
Sin embargo el lunes Demings se había pronunciado en su cuenta de Twitter diciendo que se había unido a la manifestación de curación y esperanza en donde habría hablado con varios representantes de la comunidad afrodescendiente mientras “Estados Unidos llora”, el asesinato de Floyd.
Por su parte el senador demócrata por Vermont, Bernie Sanders, quien suspendió su campaña por la presidencia en el mes de abril, dijo que felicitaba a aquellos que estaban protestando en las calles contra la brutalidad policial.
“Juntos, terminaremos con la brutalidad policial, Juntos venceremos a Trump. Juntos lucharemos por un gobierno basado en la justicia y la compasión, no en la avaricia y la mentira”, escribió Sanders en su cuenta de Twitter.
El excandidato demócrata a la presidencia señaló que la convención republicana programada en los próximos días en el estado de Florida violaba las pautas de distanciamiento social y no estaba sujeta a los consejos médicos, por lo que se refirió al presidente Trump como una amenaza para la salud y el bienestar del país.
Otra de las contradicciones vino de parte del gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo quien durante el pasado mes de mayo criticó enfáticamente a quienes se manifestaron en favor de la reapertura gradual de la sociedad estadounidense propuesta por el gobierno federal.
“No tienes derecho a poner en peligro mi salud … y la salud de mis hijos y la de tus hijos”, expresó el gobernador de Nueva York en Twitter.
Sin embargo días atrás Cuomo dijo que estaba “en pie” con aquellos que desafiaban las órdenes de quedarse en casa. “Nadie sanciona el incendio, la matanza y los robos, sino los manifestantes y la ira, el miedo y la frustración… Sí. Sí, y la demanda es de justicia”, indicó.
Eric Garcetti, alcalde de Los Ángeles amenazó en el mes de marzo con cortar los servicios de energía y agua para las empresas que reabrieran, argumentando que quería castigar el comportamiento “irresponsable y egoísta” frente a la pandemia.
Pero ante las protestas que se desataron en la ciudad tras la muerte de Floyd, Garcetti dijo: “Siempre protegeré el derecho de los angelinos a hacer oír su voz, y podemos liderar el movimiento contra el racismo sin temor a la violencia o al vandalismo”.
Como señala Fox News, el alcalde de Washington DC, Muriel Bowser amenazó con multas de 5.000 dólares o 90 días de cárcel para quienes violaran las órdenes de quedarse en casa, aunque luego de la muerte de Floyd, expresó: “Estamos afligidos por cientos de años de racismo institucional”, dijo. “La gente está cansada, triste, enojada y desesperada por el cambio”.
Retirar fondos a la policía
Por el momento el apoyo demócrata a las protestas involucra algunas otras motivaciones políticas como las propuestas que hay entorno a la desfinanciación de la policía, justificando que la medida apunta a combatir el racismo al interior de dicha entidad.
Algunos legisladores demócratas se han valido de la indignación causada por la muerte de Floyd para alentar el pedido de la comunidad Black Lives Matter de retirar fondos de la policía y redirigirlos, un argumento que ha sido comúnmente alentado por la izquierda.
Las motivaciones políticas de los demócratas no obstante no reciben el respaldo de una gran mayoría de los estadounidenses, así lo demostró una reciente encuesta realizada por ABC News y la consultora Ipsos. La encuesta mostró que alrededor de dos tercios de los estadounidenses se oponen a la idea de desfinanciar a la policía.
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