Redacción Tierra Pura – El primer ministro británico, Boris Johnson, condenó como inaceptable la represión de Hong Kong, promovida por el Partido Comunista de China (PCCh), y dijo que revisará el contrato de instalación de la red 5G pactada con Huawei, empresa vinculada a este.
“Pero lo que ha sucedido en Hong Kong es claramente una violación inaceptable de la letra y el espíritu de la Declaración Conjunta de principios de la ley básica. Ya está teniendo un efecto escalofriante en la libertad de expresión y la sociedad civil en Hong Kong”, señaló Johnson en una entrevista con el medio británico Evening Standard el 2 de julio.
En cuanto al contrato con Huawei expresó sus cuidados para que la infraestructura de su país no sea controlada por gobiernos hostiles.
“Pero no quiero ver nuestra crítica infraestructura nacional en riesgo de ser controlada por vendedores estatales potencialmente hostiles. Por lo tanto, tenemos que pensar muy cuidadosamente acerca de cómo proceder ahora”, agregó al mismo medio.
En solidaridad con los hongkoneses Johnson ofreció la residencia en su país a alrededor de 3 millones de ellos, lo que de inmediato generó la protesta del PCCh.
“Nos oponemos firmemente a esto y nos reservamos el derecho de tomar las medidas correspondientes”, respondió a su vez la embajada del régimen chino en Londres.
Por su parte el secretario de relaciones exteriores del Reino Unido, Dominic Raab, precisó que se encontraba “bajo revisión” el acuerdo con Huawei, a la que se le concedió una participación del 35% en la instalación de la red 5G británica.
En respaldo a los derechos de Hong Kong, el ministro de vivienda británico, Simon Clarke, expresó el gran valor de “la llama de la libertad”.
“La llama de la libertad es muy valiosa e hicimos garantías a esas personas cuando dejamos Hong Kong y por lo tanto haremos lo que sea necesario que esté dentro de nuestro poder para asegurarnos de que esto se mantenga”, indicó Clarke según Taiwán News.
Por otro lado, Australia también ha demostrado amplio apoyo a los hongkoneses en su lucha por la libertad, y estudia la posibilidad de recibirlos en su territorio.
Así, el primer ministro australiano Scott Morrison está considerando ofrecer “visas de refugio seguro” a los residentes de Hong Kong que puedan estar en peligro, debido a la controvertida ley de seguridad aprobada por el PCCh.
Si bien el régimen chino se comprometió, mediante un tratado internacional, a respetar los derechos de autonomía de que disfrutaban los hongkoneses como excolonia británica, aprobó una ley que los vulnera y los somete a las disposiciones del PCCh.
Esta violación del PCCh ha generado gran rechazo internacional y obligó a varios de los residentes de Hong Kong a emigrar a Taiwán, para gestionar desde allí la defensa de sus derechos democráticos.
La policía de Hong Kong arrestó el 1° de julio a cientos de manifestantes que se expresaban contra la polémica ley de seguridad vigente en el área administrada por el régimen chino.
La empresa de telecomunicaciones Huawei ha despertado el recelo de varios países por su dependencia de Beijing, lo que amenazaría su seguridad nacional por el espionaje que podría resultar de esa relación.