Traducido de americanthinker.com por Tierrapura.org
En el mundo de la política demócrata, no hay coincidencias. Con ese principio en mente, es posible entender por qué los medios de comunicación demócratas están informando de repente sobre la corrupción de Hunter Biden, una historia que se extiende hacia su padre.
La primera teoría es porque estarían adelantándose a las posibles noticias de última hora sobre el inminente arresto de Hunter. La segunda, es la que Mónica Showalter planteó: los izquierdistas usaron a Biden para llegar a la Casa Blanca (o eso creen) y ahora están listos para deshacerse de él.
Tener un hijo criminal puede ser justo lo que el bando Obama-Harris necesita para que eso suceda. Y si hay alguna duda sobre esta teoría, un artículo en el New York Times parece ponerla a prueba.
Lea también: SALVAR EE. UU.: Los norteamericanos esperan que Trump aplique la ORDEN EJECUTIVA del 2018
Los conservadores recordamos cómo, en octubre, los medios de comunicación y los tiranos de la tecnología conspiraron para bloquear cualquier informe sobre Hunter Biden, ya sea que esos informes fueran los hallazgos del Comité de Inteligencia del Senado sobre los $ 3,5 millones de dólares que Hunter recibió de la esposa de un político ruso, o los espantosos detalles de corrupción política, adicción a las drogas y libertinaje sexual contenidos en su disco duro.
Bueno, para la gente común, estas historias eran impactantes. Para los medios de comunicación y los tiranos de la tecnología, estas historias eran peligros potenciales para la candidatura de Joe Biden. Tenían que ser detenidas -y lo fueron. Twitter y Facebook, los dos mayores tiranos tecnológicos de las redes sociales, se negaron a permitir que ningún informe circulara y bloquearon a las personas, incluido al secretario de prensa del presidente Trump, de sus plataformas cuando se negaron a someterse a esta censura.
Lea también: EL PLAN DEL MAL: El Gral Flynn revela que quieren someter a EE. UU a la dictadura del NUEVO ORDEN MUNDIAL
Los medios de comunicación se burlaron de los informes sobre los tratos corruptos de la familia Biden, todos los cuales implicaban a Joe Biden como el hombre que proxenetaba a su hijo adicto por enormes sumas de dinero, como si no fueran noticias. Eso no es una exageración. Es explícitamente lo que el editor público de NPR dijo:
Asimismo, Christiane Amanpour de CNN, que ha servido como cómplice de todos los regímenes tiránicos de la Tierra, insistió en que, como es una verdadera “periodista”, no es su trabajo investigar historias. En cambio, su trabajo era determinar si los resultados de las investigaciones de otras personas se ajustaban a sus estándares. La historia de Hunter Biden no lo hizo:
Cuando el presidente Trump trató de llamar la atención de los estadounidenses sobre este tema en cuestión, durante el primer debate presidencial, Biden respondió que era una desinformación rusa, una mentira que los medios de comunicación y los tiranos de la tecnología difundieron con entusiasmo:
Sin embargo, de repente, los medios de comunicación están divulgando información sobre las investigaciones criminales de Hunter Biden y el hermano de Joe, James Biden.
Como el tweet anterior señala, estas investigaciones han estado en marcha durante años. También sabemos que un número considerable de votantes habrían rechazado a Biden y votado a Trump si hubieran sabido de la corrupción de la familia Biden. Entonces, ¿qué pasa? ¿Por qué Hunter y, por ende, el propio Joe de repente están en la mira?
Podría ser que las malas noticias están a punto de llegar desde el FBI. Después de todo, Trump prometió que “muchas cosas grandes ” sucederán pronto. La repentina avalancha de informes sobre los Bidens podría ser la forma en que los demócratas se adelanten a la noticia para que, si se muestra a Hunter caminando con el criminal, puedan decir que es “una noticia vieja”.
Sin embargo, es igualmente probable que los demócratas estén haciendo planes para sacar a Biden de la presidencia tan pronto como sea posible, o tal vez dejarlo de lado antes de que siquiera haya jurado (asumiendo, por supuesto, que Biden se aferre a ese título de presidente electo).
Como Monica Showalter señaló el jueves, Biden no está haciendo felices a los izquierdistas. Está llenando su posible administración con informantes internos, quiere que un ex oficial militar dirija el Departamento de Defensa, y sigue mostrando un rápido deterioro cognitivo. Está ofreciendo la política de la era Clinton con un lado de demencia, y eso no es lo que quiere la parte dura de la izquierda del partido.
En cualquier caso, el objetivo, siempre, fue llevar a Kamala a la Casa Blanca. No importaba y no importa que a los votantes no les gustara, como lo demuestra el hecho de que incluso su estado natal, California, no le gustara ella y su temprana renuncia a las primarias. Lo que importa es que ella, a diferencia de Hillary y Joe, es el verdadero tercer mandato de Barack Obama.
Harris es la izquierda más extrema y está dispuesta a hacer lo que sea para mantener el poder. Mientras que Joe Biden, a pesar de su corrupción y su giro hacia la extrema izquierda, todavía atesora algunas nociones residuales sobre la Constitución, Kamala no se ve obstaculizada por tales ideas anticuadas:
Ahora que los estadounidenses en general finalmente están conociendo que Hunter Biden y James Biden son corruptos y que Joe es el gran árbol corrupto del que cayeron estas manzanas podridas, habrá mucha presión sobre Joe para que se retire tan pronto como sea amablemente posible.
Es el New York Times el que revela el juego. El jueves, publicó un artículo francamente lamentable titulado “Es probable que la investigación de su hijo se cuelgue de Biden cuando asuma el cargo”:
A menos que el Departamento de Justicia de Trump descarte a Hunter Biden, el nuevo presidente se enfrentará a la posibilidad de que su propia administración maneje una investigación que podría exponer a su hijo a un proceso penal”.
El párrafo inicial habla de Biden en una “situación sin salida” que podría ser “política y legalmente peligrosa”, y el informe continúa en esa línea. El subtexto es claro: váyase. Márchese ahora.
Joe cumplió su propósito al ser el testaferro insulso de un asalto completo de la izquierda a la Casa Blanca. Ahora es hora de que se vaya. Y aunque sus superiores le recompensen por un trabajo bien hecho con el placer de la asunción, pueden estar seguros de que lo presionarán para que haga lo que prometió hacer, que es inventar una enfermedad respetable y renunciar lo antes posible.
Envía tu comentario
Últimas
