Por Samantha Kamman

A pesar de haber ocupado el cargo durante menos de un mes, el 4 de febrero se conmemoró a la vicepresidenta estadounidense Kamala Harris con la instalación de un monumento de cristal frente al Lincoln Memorial en Washington.

Según Fox News, el creador del monumento, Simon Berger, comenzó su obra después de las elecciones de noviembre y se la basó en una foto de Harris tomada por la fotógrafa Celeste Sloman. El artista rompió intencionalmente el cristal del retrato de casi dos metros de altura y 160 kilos para simbolizar cómo Harris ha roto el “techo de cristal”.

El hecho de que Harris sea la primera mujer de color elegida para el segundo cargo más alto de la nación es ciertamente digno de celebración. Sin embargo, por muy histórico que sea para el país, el carácter de la exsenadora de California ensombrece el logro.

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El historial legal y político de la vicepresidenta está plagado de escándalos. Aunque también afirma ser una defensora de las mujeres, Harris siempre ha defendido políticas que tienen más probabilidades de denigrar a las mujeres que de empoderarlas.

El historial de corrupción de Kamala Harris como fiscal y fiscal general de California

Los copatrocinadores de la exhibición, Chief y el Museo Nacional de Historia de la Mujer, elogiaron el monumento por resaltar cómo el legado político y legal de Harris alienta a las mujeres a ascender a posiciones poderosas. La admiración que expresaron las dos organizaciones de mujeres por la vicepresidenta convenientemente omitió mencionar la historia de Harris de tomar decisiones controvertidas cuando estaba en una posición de autoridad.

Mientras Harris se proclama defensora de los sobrevivientes de agresiones, no procesó a los sacerdotes católicos acusados ​​de abuso sexual cuando era fiscal de distrito de San Francisco y luego fiscal general de California.

“No hizo nada”, dijo Joey Piscitelli, portavoz de la red social Survivors Network of those Abused by Priests en el norte de California, a The Associated Press (AP) en 2019.

“Piscitelli dice que Harris nunca le respondió cuando le escribió para decirle que un sacerdote que lo había abusado sexualmente todavía estaba en el ministerio en una catedral católica local”, informó AP. “Y, dice, ella no respondió cinco años después cuando él volvió a escribir, instándole a que divulgara los registros del clero acusado para ayudar a otras presuntas víctimas que estaban presentando demandas”.

“De todos los fiscales del Área de la Bahía, ella es la única que no cooperaba con nosotros”, dijo Rick Simons, abogado personal de Piscitelli y abogado designado por el tribunal que coordina los casos de abuso del clero presentados en el norte de California.

Como señaló AP, los católicos conforman un grupo enorme de votantes potenciales en San Francisco. Michael Meadows, un abogado del Área de la Bahía que ha representado a víctimas de abuso por parte del clero, dijo que el silencio de Harris sobre el tema probablemente fue motivado por el “riesgo político potencial” que implica actuar contra la iglesia.

Sin embargo, la negativa a procesar a los sacerdotes católicos acusados ​​de abuso sexual no es la única mancha en el historial de Harris.

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Como informó The Appeal en 2019, cuando Harris era fiscal general del estado, se negó a probar pruebas de ADN que podrían haber exonerado a Kevin Cooper, un hombre condenado a muerte en la prisión de San Quentin de California. Harris no revirtió su posición hasta que ella salió de la oficina del fiscal y ya no tenía el poder para ayudar a Cooper.

La ex fiscal general también usó la autoridad de su cargo para proteger a un patrocinador político: es decir, Planned Parenthood. Después de que el periodista pro-vida David Daleiden y su equipo encubierto en el Center for Medical Progress (CMP, por sus siglas en inglés) expusieron al proveedor de servicios de aborto por tráfico ilegal de partes del cuerpo abortado, Harris apuntó a Daleiden a pedido de Planned Parenthood.

Una petición presentada por la Sociedad de Thomas More de “anular y atravesar” la orden de registro que Harris ordenó contra Daleiden en 2016 expuso sus profundos vínculos con la industria del aborto. La petición señaló que los ejecutivos de Planned Parenthood se comunicaron con la oficina de Harris para determinar cómo se podría obtener una orden judicial para registrar el apartamento de Daleiden en busca de evidencia relacionada con la investigación encubierta de CMP.

En lugar de presentar cargos penales contra Planned Parenthood, Harris presionó para que se investigara a Daleiden y su compañera activista de CMP, Sandra Merritt. Cuando Harris fue elegida para el Senado, su sucesor, Xavier Becerra, lo llevó a cabo al presentar cargos penales contra ellos en 2015.

Irónicamente, Harris escribió en sus memorias de 2019, “The Truths We Hold”, que “Estados Unidos tiene una historia profunda y oscura de personas que utilizan el poder del fiscal como un instrumento de injusticia”.

“Conozco bien esta historia — de hombres inocentes incriminados, de cargos presentados contra personas sin pruebas suficientes, de fiscales que ocultan información que exoneraría a los acusados, de la aplicación desproporcionada de la ley”, escribió.

Pero, Harris es culpable de lo que ella condena. Es difícil de pasar por alto su pasado, y cualquier intento de agregar un toque feminista a su carrera se convierte en un gesto performativo.

La defensa del aborto por parte de Kamala Harris socava a las mujeres

Otro problema con el tipo de feminismo de Harris es que enfrenta a las mujeres con sus propios hijos. Según Vote Smart, Harris tiene una calificación del 100 por ciento del Fondo de Acción de Planned Parenthood.

“También protegeré a Planned Parenthood de los intentos republicanos de retirar fondos de los servicios de salud esenciales, nominaré a jueces que respeten a Roe v. Wade y revertiré los intentos ilegales de la administración Trump de recortar las subvenciones del Programa de Prevención del Embarazo en Adolescentes basadas en evidencia”, Harris, en ese entonces candidata presidencial demócrata, escribió en un artículo de opinión de 2019 para Concord Monitor en New Hampshire.

“También continuaré luchando para que todas las mujeres tengan acceso a la atención de la salud reproductiva independientemente de cuánto dinero ganen al continuar mi carrera de oposición a la Enmienda Hyde”, escribió.

Según el Instituto Charlotte Lozier, la Enmienda Hyde — que prohíbe el uso de fondos federales para abortos en los Estados Unidos a menos que la vida de la mujer esté en peligro o el embarazo sea resultado de una violación o incesto — ha salvado más de 2 millones de vidas.

Revocar la Enmienda Hyde obligaría a los contribuyentes a financiar el aborto en contra de su voluntad y aumentaría la cantidad de vidas inocentes perdidas por aborto — específicamente, las mujeres pobres que Harris afirma que está tratando de proteger.

¿Es el aborto el único remedio que una feminista como Harris puede ofrecer a las mujeres que enfrentan un embarazo difícil? Esto no solo degrada a las mujeres, sino que la consecuencia de las propuestas políticas de Harris es que todos los estadounidenses podrían verse obligados a apoyar el aborto.

Harris ha apoyado obligar a los estados a permitir el aborto legal incluso si se anula al caso judicial Roe. Ella también se ha opuesto a las restricciones a nivel estatal que requerirían que las clínicas de aborto cumplan con los mismos estándares básicos de salud que cualquier centro quirúrgico.

Las jóvenes merecen un mejor modelo a seguir que una mujer que valora una ideología radical del aborto sobre la vida de las mujeres.

Erigir un monumento de cristal a alguien como ella celebra la importancia histórica de la reciente inauguración, pero ignora por completo la naturaleza relevante del carácter de una mujer y cómo determina su elegibilidad para servir como modelo a seguir.

El historial de Harris de corrupción y apoyo al aborto como una fuente de igualdad de las mujeres significa que las niñas no deberían conformarse con menos al mirarla como una fuente de admiración.

La Casa Blanca no respondió a la solicitud de comentarios de The Western Journal.

Fuente: westernjournal.com

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