Mientras Fauci elogiaba las políticas asesinas de Cuomo, los ancianos morían en los geriátricos

Traducido de Big League Politics por Tierrapura.org

El Dr. Anthony Fauci alabó una vez la respuesta al COVID-19 del gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, como modelo para la nación, mientras mataba a los ancianos alojando a los pacientes del COVID en residencias de ancianos a la vez que mentía sobre el número de víctimas mortales a las autoridades federales.

Fauci, que ha hecho cientos de declaraciones falsas e hipócritas a lo largo de la pandemia, habló de las políticas genocidas de Cuomo contra el COVID en julio de 2020.

“Tenemos que hacer las cosas que están muy claras que es necesario hacer para darle la vuelta a esto”, dijo Fauci durante una aparición en PBS NewsHour. “Recuerden que podemos hacerlo. Sabemos que cuando se hace bien, se reducen los casos. Lo hemos hecho. Lo hemos hecho en Nueva York”.

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“Nueva York se vio más afectada que cualquier otro lugar del mundo. Y lo hicieron correctamente haciendo las cosas de las que usted habla”, añadió Fauci, que ha trabajado en Washington D.C. como director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas desde 1984.

Este era el tipo de propaganda psicótica que la oficina de Cuomo lanzaba mientras perpetraba el desastre del COVID:

Big League Politics informó ayer de que Cuomo mintió a las autoridades federales para impedir una investigación sobre sus políticas asesinas dirigidas a los más vulnerables:

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, ocultó datos sobre el impacto de su política de cuarentena en residencias de ancianos para evitar el escrutinio de los investigadores federales. Cuomo había obligado a las residencias de ancianos de Nueva York a admitir a los pacientes que dieran positivo en el COVID, en un desastre médico que, desde entonces, se ha determinado que ha costado innecesariamente la vida a miles de ancianos en el estado.

El New York Post informó de que un ayudante de Cuomo admitió como tal a los legisladores demócratas del estado de Nueva York el jueves. La secretaria del gobernador, Melissa DeRosa, admitió que la búsqueda relacionada con la política de residencias de ancianos se disparó directamente en respuesta a las críticas a la política por parte del presidente Donald Trump.

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“Empieza a tuitear que matamos a todo el mundo en las residencias de ancianos”, dijo DeRosa sobre Trump, en referencia a los tuits presidenciales que cuestionaban la política de residencias de ancianos en agosto. “Empieza a ir tras [el gobernador de Nueva Jersey, Phil] Murphy, empieza a ir tras [el gobernador de California, Gavin] Newsom, empieza a ir tras [la gobernadora de Michigan] Gretchen Whitmer”.

“Entonces estábamos en una posición en la que no estábamos seguros de si lo que íbamos a dar al Departamento de Justicia, o lo que les damos a ustedes, lo que empezamos a decir, iba a ser usado en nuestra contra mientras no estábamos seguros de si iba a haber una investigación”.

Un asambleísta demócrata de Queens describió las declaraciones de DeRosa como nada menos que un intento de evitar el escrutinio federal, impidiendo que los responsables políticos de Nueva York se enteren de las ramificaciones mortales de la política de residencias de ancianos en el proceso.

“[Es] como si admitieran que estaban tratando de evitar tener cualquier prueba incriminatoria que pudiera poner a la administración o al [Departamento de Salud] en más problemas con el Departamento de Justicia”, dijo Ron Kim.

Es casi imposible que el Departamento de Justicia investigue la política de residencias de ancianos ahora que Joe Biden es presidente. Algunos han especulado que la política le costó a Nueva York hasta 10.000 vidas, casi la mitad de las muertes en el estado con más muertes por COVID-19 del país.

Fauci y Cuomo condenaron a miles de ancianos a una muerte cruel y dolorosa separados de sus seres queridos. En un mundo justo, se enfrentarían a un castigo por crímenes contra la humanidad. Pero en la América ocupada por los globalistas, se les colma de elogios y premios. Por eso Occidente se está muriendo.