Por José Gregorio Martínez
La cultura de la cancelación, la censura y la persecución en Estados Unidos tiene un objetivo con nombre y apellido: Donald Trump. Si bien muchos conservadores y seguidores del expresidente también han sufrido estas consecuencias, la reciente decisión de YouTube deja claro que el único propósito de las Big Tech es desaparecer de las pantallas de cualquier dispositivo al líder republicano para evitar que su mensaje mantenga viva la esperanza de sus votantes que ya piensan en la elección de 2024.
Desde la campaña presidencial, las redes sociales habían comenzado a clasificar como “información engañosa” los mensajes de Trump. Luego de la elección del 3 de noviembre la censura arreció frente a las denuncias de fraude que hizo el republicano. Y la irrupción en el Capitolio ocurrida el 6 de enero fue la excusa perfecta para la cancelación total.
Twitter eliminó de forma permanente la cuenta de Donald Trump. Facebook e Instagram prohibieron de forma indefinida la propagación de sus mensajes. Snapchat siguió los mismos pasos. Y YouTube, propiedad de Google, aplicó la misma medida a la cuenta del exmandatario. Pero para la dictadura de las Big Tech no ha sido suficiente.
Este jueves se conoció que YouTube tomó la decisión de eliminar de su plataforma el discurso ofrecido por Donald Trump el pasado domingo 28 de febrero en el Conservative Political Action Conference (CPAC), afectando a incluso a terceros. En otras palabras, YouTube canceló la difusión en su plataforma del evento denominado America Uncanceled (América sin cancelar).
La única información oficial al respecto por parte de YouTube vino de la presidente ejecutiva de la compañía, Susan Wojcicki, quien se limitó a decir que YouTube levantará su suspensión al canal del expresidente Donald Trump «cuando determine que el riesgo de violencia haya disminuido». Esta plataforma suspendió el canal de Trump por presuntamente violar políticas contra la incitación a la violencia después del asalto al Capitolio.
El chantaje de YouTube
El medio Right Side Broadcasting Network (RSBN) denunció a través de su cuenta en Twitter que YouTube le suspendió el servicio por dos semanas y eliminó todos los videos del discurso de Donald Trump por supuestamente haber “violados sus pautas sobre desinformación electoral”.
Pero como si se tratara de un chantaje, YouTube le habría pedido a RSBN que alertara sobre la supuesta falsedad del mensaje de Donald Trump en el video que se acercaba a las 4 millones de vistas si querían conservarlos. La respuesta fue negativa y en su lugar el medio prefirió enfrentar la sanción pero manteniéndose apegado a sus principios, tal como lo explicó en un comunicado que reseña The Postmillennial.
“Vale la pena señalar que, de acuerdo con los términos de YouTube, se nos habría permitido mantener el video del discurso de Trump en el CPAC si hubiéramos proporcionado ‘punto de vista compensatorios’. Básicamente, hubiéramos tenido que salir al aire y decir que todo lo que Trump acababa de decir sobre el fraude electoral no era cierto (…) Incluso si creyéramos eso, no nos habríamos vendido así solo para mantener un video. Intentamos seguir las reglas. No expresamos ciertas cosas que normalmente haríamos, pero no vamos a censurar al presidente Trump ni a desmentir las cosas que él dice y con las que francamente estamos de acuerdo”.
RSBN cierra el comunicado explicando que el mecanismo bajo el cual trabajan no se ajusta a lo que pedía YouTube para desmentir el discurso de Donald Trump. “Nuestra red ofrece muy pocos comentarios. Básicamente, encendemos una cámara y mostramos lo que está sucediendo y te dejamos decidir. La gente puede elegir verlo, no verlo, odiarlo o amarlo. Eso se llama libertad. Si eso ya no está permitido, que Dios nos ayude”.
Fuente: panampost.com