Por Mamela Fiallo Flor
Black Lives Matter recaudó 90 millones de dólares en el último año. Pero no lo ha repartido entre sus activistas y tampoco ha ayudado a las familias de las víctimas de violencia policial a las que alega defender.
Así quedó evidenciado en el reclamo de Michael Brown Sr, cuyo hijo tenía su mismo nombre y fue abatido por el policía Darren Wilson en Ferguson, Missouri, en 2014, desatando así una ola de protestas.
«¿Por qué la fundación de mi familia no ha recibido ninguna ayuda del movimiento?» Brown preguntó en un comunicado. «¿Cómo puedes dejar a las familias que ayudan a la comunidad sin ningún tipo de financiación?»
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Hasta ahora, la familia Brown solo ha recibido 500 dólares de grupos afiliados a Black Lives Matter. Y Brown ha preguntado dónde irán todos los fondos recaudados por BLM.
En un video lo detalló Tory Russell, activista y cofundadora de la IBFA (International Black Freedom Alliance), quien se suma al reclamo de la familia de Brown y solicitan en conjunto 20 millones de dólares.
Luego de que se hizo público el anuncio de la cantidad de dinero que ha producido BLM, aprovecharon para exigir el monto.
Black Lives Matter Global Network Foundation dijo a Associated Press que otorgó 21,7 millones de dólares en subvenciones a los capítulos de BLM y otras organizaciones dirigidas por personas negras y terminó 2020 con un saldo de más de 60 millones de dólares.
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La IBFA anunció en un comunicado que quiere el dinero «para continuar el trabajo que ellos y otros han estado haciendo desde el levantamiento de 2014».
«No estamos pidiendo una limosna, sino fondos para mantener el movimiento fuerte donde comenzó», dijo Russell en el video.
La IBFA dijo que «utilizarán estos fondos durante varios años para restablecer los esfuerzos comunitarios, proporcionar ayuda mutua y programas para la comunidad negra, así como establecer un centro comunitario en honor a Mike Brown Jr. para servir a la comunidad».
“Será un centro donde el activismo y el empoderamiento de la comunidad se fusionan por el bien mayor del área de St. Louis. Se dará dinero a otras familias afectadas por la brutalidad policial, como el activista asesinado Darren Seals y Josh Williams, que actualmente está encarcelado por lo que creen que son cargos falsos», agregó.
Black Lives Matter no reparte recursos entre sus integrantes
Las fundadoras de Black Lives Matter han declarado públicamente ser marxistas entrenadas. Por tanto, en teoría, deberían ser promotoras de la redistribución de la riqueza. Sin embargo, no han distribuido el dinero recaudado ni siquiera entre sus integrantes.
Diez capítulos locales de BLM emitieron un comunicado denunciando que «la mayoría de los capítulos han recibido poco o ningún apoyo financiero de BLMGN desde su lanzamiento en 2013».
«Desde el establecimiento de Black Lives Matter Global Network, nuestros capítulos han planteado constantemente preocupaciones sobre la transparencia financiera, la toma de decisiones y la responsabilidad. A pesar de años de esfuerzo, BLMGN nunca ha producido ningún proceso interno aceptable de rendición de cuentas y estos eventos recientes han socavado los esfuerzos de los capítulos que buscan democratizar sus procesos y recursos», indica el comunicado.
El marxismo militante entre las fundadoras de Black Lives Matter es tal que una de las tres, Opal Tometi, condecoró a Nicolás Maduro durante su visita a Harlem, Nueva York y viajó ella hasta Caracas para ser observadora en las elecciones legislativas del 2015. En vista de que esas elecciones las ganó la oposición, los llamó “contrarrevolucionarios”.
Más de 5 millones de venezolanos han escapado del hambre y la persecución. Para la jerarquía de BLM eso los vuelve contrarios a la revolución.
Por lo pronto, no reparten por igual el botín. Mientras los revolucionarios se han enriquecido a expensas de la miseria del pueblo venezolano (Hugo Chávez le heredó a su hija María Gabriela una fortuna de 4000 millones de dólares), entre 2005 y 2019, la pobreza monetaria pasó de 34,4 % a 96,2 % y la pobreza extrema aumentó de 10,7 % a 79,3 %.
Es decir, casi 80% de los venezolanos no tienen los recursos suficientes para alimentos básicos.
Por su parte Black Lives Matter ofrece un “socialismo racial” que busca llevar la lucha de clases, entre ricos y pobres, y trasladarlo a nivel racial, de modo que se pagará impuestos o no de acuerdo al color de piel.
Hasta ahora han demostrado que ni siquiera entre su propia organización han sido capaces de redistribuir la riqueza.
Fuente: panampost.com
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