Gerardo Gabiray Camarena
Eduardo Verástegui se ha convertido en mucho más que una estrella de cine y de televisión. Su trayectoria, ideas y proyectos se han consagrado como referencia e inspiración para millones de hispanos en América y en otros países. Conversamos con él acerca de su participación la Conferencia de la Acción Política Conservadora (CPAC) su labor En México y su trabajo en el movimiento en defensa de la vida.
Eduardo Verástegui, gracias por aceptar esta entrevista. En CPAC compartiste un panel muy interesante con Christopher Landau, el exembajador de Estados Unidos en México ¿Cómo ves la presencia y la participación de los hispanos en el movimiento conservador y qué tanta apertura observas del movimiento conservador hacia la comunidad hispana?
Eduardo Verástegui: Va mejorando. Sin embargo, estamos a 10 % todavía, falta muchísimo por hacer. Tenemos que seguir construyendo este puente entre el movimiento conservador americano (el de Estados Unidos) y el movimiento conservador de los hispanos que vivimos en Estados Unidos, en México o en el resto de Latinoamérica, porque siempre estamos conectados.
La gran mayoría de los hispanos que vivimos en Estados Unidos tenemos siempre un vínculo con nuestro país de origen. Por ejemplo, yo soy de Tamaulipas, nací en Ciudad Mante, Tamaulipas; crecí en Xicoténcatl, Tamaulipas; viví en Tampico, viví en Victoria, me mudé a los 18 años a la Ciudad de México, viví más de 10 años en la Ciudad de México; después estuve viviendo en Miami, luego en Los Ángeles, después regresé a Miami, después regresé a México.
Entonces siempre estás, de alguna manera, involucrado en los ambientes hispanos, donde quiera que te mueves, te llevas a México contigo, pero no te mueves con toda la familia: tus papás se quedan en un lugar, tus hermanas en otro lugar, tú te vas a otro lugar. A veces, te vas con miembros de la familia; por ejemplo, estuve viviendo en Los Ángeles con mi hermana Daniela, se fue mi hermana Alejandra, y ellas se quedaron en Los Ángeles; yo ahora estoy en México.
De alguna manera siempre estamos moviéndonos en los ambientes hispanos, principalmente México y Estados Unidos. Somos más de 60 millones de hispanos viviendo en Estados Unidos, la gran mayoría mexicanos, y como bien lo decía Ronald Reagan: “los hispanos son conservadores, son republicanos, pero no lo saben” y es un problema muy grave.
Te cuento una historia. Hace poco estaba en Dallas, Texas; pedí un Uber y fueron 25, 30 minutos de tráfico; vi una cruz muy grande colgada del espejo, y le pregunto al chofer ¿de dónde eres? Me contesta, de Puerto Rico.
¿Qué haces acá en Texas?
- Me casé con una mexicana y aquí tenemos a la familia.
¿Por quién votaste?
- Por Biden.
Una pregunta mi hermano, veo que hay una cruz ahí en el espejo, ¿la camioneta es tuya?
- Sí.
¿Qué opinas del aborto?
- Es un crimen siempre, es un asesinato, es lo más perverso que se le puede hacer a un bebé inocente que no se puede defender, que no tiene voz
Y me dio una lección ahí, una cátedra sobre este crimen y yo estaba simplemente escuchando. Él no sabía ni quién era yo, iba con mi cubrebocas. Entonces, le pregunté ¿y qué opinas de la familia, de los valores, de la fé, de la religión? ¿qué significa Dios en tu vida? Al final le digo: oye maestro, todo lo que me estás diciendo, todos tus valores están más alineados con el Partido Republicano que con Biden, ¿por qué entonces votaste por Biden si él es proaborto y no está favor de esos valores que me acabas de decir. Biden dice ser un católico practicante, pero está a favor del aborto y otras cosas que no van en línea con lo que la Iglesia enseña.
Hay un engaño tremendo por parte de algunos medios de comunicación, que están mandando mensajes con mentiras disfrazadas de verdad y están haciendo un daño tremendo, están engañando a la gente.
Tienes el caso perfecto del chofer de Uber, cuyos valores están más en línea con el Partido Republicano y con la administración Trump y sin embargo votó por el otro pon un tema: por el tema de migración. Él decía. “mi esposa es mexicana y él (Trump) es antinmigrante y no quiere a los mexicanos” y de ahí no lo sacabas. Sin embargo, por un tema emocional no le puso ya atención a todo lo que era importante también para él.
En la gran mayoría de los hispanos en Estados Unidos, el pueblo es provida, pro-familia, pro-fé, pro-Dios ¿Qué tenemos que hacer? Lograr que el movimiento conservador, que en este caso tiene una opción nada más: el Partido Republicano [se comunique mejor]. No se ha comunicado como tendría que comunicarse con el pueblo hispano de Estados Unidos, no han sabido cómo hacerlo.
Creo que el embajador, Christopher Landau es un ejemplo perfecto de lo que debería de ser, pero como él hay “contados con los dedos de una mano”, por eso empecé diciendo que estamos a un 10 %, él es ese 5 o 10 %. Creo que el trabajo que hizo en México y que sigue haciendo aquí, en Estados Unidos, va a ser un ejemplo de por dónde tenemos que caminar, y eso es lo que también estoy tratando de hacer: ser un interlocutor, una especie de puente entre los dos pueblos. El pueblo americano conservador y el pueblo hispano conservador.
Hablando de México, ¿en qué consiste la labor que estás realizando allá?
Eso es lo que estamos haciendo también en México. Gracias a la película “Inesperado” (Unplanned) pudimos hacer una gira por 31 estados y la Ciudad de México. Mientras íbamos visitando estado por estado, con gobernadores, con alcaldes, con empresarios, con líderes de diferentes sectores y dábamos el discurso de que ser provida no solamente significa defender el derecho humano fundamental más importante, que es el derecho a nacer, yo les decía que una vez defendiendo a nacer, no podemos parar ahí.
Tenemos que seguir con los niños en situación de calle, ver por los niños víctimas de trata para explotación sexual, los adolescentes que están muriéndose porque sufren de alguna adicción, las madres abandonadas, maltratadas, los que han sido falsamente acusados, están en la cárcel y no tienen para pagarle a un buen abogado para que los defienda. Ser provida es ver por el enfermo que no tiene para un buen tratamiento para curarse, hay que estar ahí también.
Ser provida significa ver por los ancianos que están muriéndose de tristeza en un asilo, porque ni siquiera su propia familia va a visitarlos, hay que estar ahí también.
Entonces estiramos el significado de la palabra provida, lo llevamos a todas las etapas de desarrollo de la vida humana, desde la concepción hasta la muerte natural, y regresamos el círculo: ser provida significa ser la voz de aquellos que no tienen voz, defender a aquellos que no se pueden defender y me refiero claramente a los bebés que se encuentran dentro del vientre de su madre y corren el riesgo de ser abortados. Si toda madre tuviera el vientre de cristal, ninguna abortaría, porque vería el milagro que lleva dentro.
Entonces la gente empezó a levantar la mano y me decían “yo quiero ser parte del movimiento”. Al principio, no sabíamos de qué hablaban. [Les respondíamos] Sí, el movimiento, hashtag la película Inesperado, compartan el tráiler, y seguíamos con la gira.
A los estrenos de la película Inesperado en cada ciudad llegaban militares, policías, bomberos, maestros, estudiantes, rectores, participaba gobierno y sociedad civil. Al final siempre les decía:
Les tengo una buena y una mala: la buena es que la mayoría del pueblo mexicano es provida; la mala es que no estamos articulados, no estamos organizados y hace más ruido un árbol que cae, que un bosque que florece.
Por lo tanto, ¿qué vamos a hacer? Tenemos que articularnos, tenemos que aprender a trabajar en grupo. Unidos somos más fuertes, somos la mayoría y no deberíamos perder una sola batalla, pero estamos perdiendo batallas y además no hay quién nos represente, tantos partidos que hay en México y no nos están representando, terminan trabajando solos.
Muchas veces le he preguntado a un amigo o compañero de trabajo “¿quién es tu diputado?” y me responden “no sé”. Desde ahí estamos mal; votan y después “los botan”, no hay acompañamiento y ni siquiera un entendimiento de cuál es el papel que debe jugar un legislador, el papel que tienen que jugar tus representantes. Entonces estamos desconectados completamente, y no tenemos representantes que representen a la mayoría del pueblo mexicano.
Ahí fue donde nos dimos cuenta de que la gente seguía levantando la mano y ahí entendimos, que no se referían a la película, sino que hablan de un movimiento. A ese movimiento le pusimos como nombre “Viva México”, porque es un movimiento de vida. Hay que defender la vida de todos, y entonces invité a 16 legisladoras, a las que más tarde se sumaron más de 200 legisladores.
¿Por qué a ellos? Porque son los representantes del pueblo mexicano, y dentro del pueblo hay prioridades: primero los que no se pueden defender. Los bebés que se encuentran dentro del vientre de su madre también son un pueblo que merece ser representado, como merece ser representado un niño, un adolescente, un adulto y un anciano.
Le pusimos “Viva México” porque queremos que vivan todos, que viva México. ¿Quién es México? Los mexicanos. ¿Cuál es el origen de los mexicanos? La concepción. México se gesta en los vientres de sus madres. Que viva México y no que muera.
Ese es el movimiento, un movimiento de vida, humanista, de la sociedad, que pretende articularse para no perder las batallas que estamos perdiendo hoy en día, y ser más propositivos para no siempre estar a la defensiva. Hay que proponer lo que es bueno, bello y verdadero.
¿Cuáles serían los esfuerzos? ¿Cómo está trabajando el movimiento “Viva México”? ¿Cómo se pueden sumar las personas a las que este mensaje les resulta atractivo, especialmente en un entorno como el de México, donde pareciera que los partidos representan más a un grupo de ONG’s en la Ciudad de México que al resto del país?
Eduardo Verástegui: Estamos huérfanos y justamente por eso nace el movimiento. Porque nos dimos cuenta de que la gran mayoría del pueblo mexicano no tenemos representantes. Esto fue en 2019, la idea era que en marzo o abril del 2020 íbamos a empezar la segunda gira, ya conscientes de que hay un movimiento.
La primera gira era simplemente crear conciencia sobre la importancia de defender la vida desde la concepción hasta la muerte natural. La segunda gira será con la película “Sound of Freedom”, porque ser provida significa no solamente defender al bebé no nacido, sino también a los niños que son secuestrados para explotación sexual y tráfico de órganos.
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Tristemente, México es el país número uno de niños desaparecidos para explotación sexual y tráfico de órganos. Entonces dijimos: vamos ahora, con esta película, a crear consciencia sobre el tema, crear un movimiento para terminar con esta perversión, invitando a los gobernadores, a los legisladores, ahora en un tema que no es polémico; nadie está a favor de que a un niño se le secuestre para que lo violen, nadie.
Es más, yo creo que hasta las personas que están involucradas en ese crimen, públicamente están en contra. Es tan perverso, tan horrible, tan asqueroso, que nadie podría abrazar este tema y llevarlo a los congresos para que se legisle como derecho. ¿Derecho de qué? Es una perversión tremenda.
Entonces dijimos: vamos en el 2020 a hacer una gira y entonces sí vamos a invitar a la gente a que se sume, a que se inscriban en nuestra página de internet MovimientoVivaMéxico.org para tener una red nacional, estar conectados y entonces sí empezar a publicar noticias y sumar esfuerzos a la hora de casos como el de Quintana Roo, donde [el Congreso local] está votando a favor o en contra de la vida.
Bueno [el objetivo] es estar más conectados, que se entere todo México, que todo el movimiento provida esté pendiente, poner presión, ponerle luz, que vean que realmente la obligación de estos legisladores, que fueron votados en su inmensa mayoría por un pueblo provida, no traicionen al pueblo.[Sin embargo] se vino el coronavirus, no pudimos hacer la gira. Entonces todo se quedó en pausa, y ahorita se está quitando la pausa porque la película ya la tenemos lista. Vamos a empezar la gira a finales de abril, visitando los 31 estados y la Ciudad de México; 32 estrenos, 32 conferencias de prensa.
Ahí es donde vamos a lanzar ya en grande el movimiento para que se inscriban en nuestra página MovimientoVivaMéxico.org y allí es donde vamos a dar información de qué sigue. Es un calendario que vamos a ir transmitiendo poco a poco. Esto apenas nació, llegó para quedarse, se ha ido construyendo de una manera muy natural.
Es un movimiento de todos, no solamente de un grupo, sino todos los que crean en Dios, que crean en México, que crean en la defensa de la vida humana desde el principio hasta su fin natural, que crean en la educación académica y moral. Creemos en el sueño mexicano; tenemos un país muy rico, donde hay mucha gente pobre y eso se tiene que corregir.
Ojalá tuviera una varita mágica y tocara a México y se convirtiera en el país de primer mundo que todos soñamos, pero hay voluntad y cuando la mayoría del pueblo mexicano se la crea y se de cuenta de dónde está parado, es cuestión de tiempo para convertir a México en un país de primer mundo en todos los sentidos: espiritualmente, económicamente, laboralmente, culturalmente. En todos los sentidos.
Fuente: El American
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