Este artículo es la continuación de: Las bases militares subterráneas de EE. UU: ¿Cómo funcionan? (Primera parte)
Traducido de amg-news.com por TierraPura.org
Está la base de Dulce, en Nuevo México. Dulce es un pequeño pueblo del norte de Nuevo México, situado por encima de los 2.000 metros de altitud en la reserva india Jicarilla Apache. Sólo hay un motel importante y unas pocas tiendas. No es un pueblo turístico y no está lleno de actividad. Pero Dulce tiene un profundo y oscuro secreto. El secreto se alberga en las profundidades de la maleza de Archuleta Mesa.
Función: Investigación de funciones relacionadas con la mente, experimentos genéticos, entrenamiento de control mental y reprogramación. Hay más de 3000 cámaras de vídeo en tiempo real en todo el complejo en lugares de alta seguridad (entradas y salidas). Hay más de 100 salidas secretas cerca y en los alrededores de Dulce. Muchas en torno a Archuleta Mesa, otras al sur en torno al lago Dulce e incluso tan al este como Lindrith. Las secciones profundas del complejo conectan con sistemas de cavernas naturales.
Nivel 1 – garaje para el mantenimiento de las calles.
Nivel 2 – garaje para trenes, transbordadores, tuneladoras y mantenimiento de discos.
Nivel 3 – se pesa a todo el mundo, desnudo, y luego se le da un uniforme de salto. El peso de la persona se pone en una tarjeta de identificación informática cada día. Cambios de más de tres dólares requieren un examen físico y una radiografía.
Nivel 4 – Investigación humana en áreas “paranormales” – telepatía mental, control de la mente, hipnosis, visión remota, viajes astrales, etc. Al parecer, la tecnología está aquí para permitirles saber cómo manipular el ‘Cuerpo Bioplásmico’ Desarrollo de un arma láser que puede causar a distancia quemaduras y molestias en su objetivo. Pueden bajar los latidos del corazón con ‘Ondas Delta’ de Sueño Profundo, inducir una descarga estática, y luego reprogramar, a través de un enlace cerebro-ordenador.
Nivel 5 – la seguridad es severa. Guardias armados patrullan constantemente, y además de las áreas sensibles al peso hay estaciones de huellas de manos y ojos. Aquí, está el dispositivo que potencia la transferencia de átomos.
Nivel 6 – El nivel 6 se llama privadamente “Sala de las Pesadillas”. Aquí se encuentran los laboratorios de genética. Se realizan experimentos con peces, focas, pájaros y ratones que han sido ampliamente alterados respecto a sus formas originales.
También está la instalación de Greenbrier, en White Sulfer Springs, Virginia Occidental, bajo el Greenbriar Resort. La instalación de Continuidad del Gobierno destinada desde 1962 a albergar al Congreso de los Estados Unidos, cuyo nombre en clave es Casper, se encuentra en los terrenos del prestigioso complejo turístico Greenbrier.
El búnker se encuentra bajo el ala de Virginia Occidental, que incluye una completa clínica médica. La construcción de la instalación, que comenzó en 1959, requirió 2,5 años y 50.000 toneladas de hormigón. Los muros de hormigón reforzado con acero del búnker, que se encuentra a 6 metros bajo tierra, tienen un grosor de 60 centímetros.
Las instalaciones incluyen cámaras separadas para la Cámara de Representantes y el Senado, así como una sala más grande para sesiones conjuntas. Éstas se encuentran en el “Salón de Exposiciones” del ala de Virginia Occidental, que incluye entradas para vehículos y peatones que pueden ser rápidamente selladas por puertas explosivas. Ésta ni siquiera se esconde, e incluso es una atracción turística. La bóveda subterránea se construyó para satisfacer las necesidades de un Congreso que se escondía; de hecho, el hotel es una réplica de la Casa Blanca. El 6 de diciembre y el 6 de enero, las palabras del presidente Trump conmovieron al mundo.
La zona subterránea cuenta con una cámara para el Senado, otra para la Cámara y una enorme sala para sesiones conjuntas. Aunque el hotel dice que ofrece visitas guiadas a la zona de 112.000 metros cuadrados a diario, la instalación sigue en pie y sus operarios siguen trabajando a cubierto en el hotel. El secreto que ha rodeado el lugar lo ha protegido tanto del escrutinio público como de la reevaluación oficial.
La mayoría de los estadounidenses no creerán que se produzca un Holocausto americano hasta que lo vean con sus propios ojos.
Continuará…
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