Traducido de NewsPunch por TierraPura.org
La mayoría de la gente en el Reino Unido ahora interpreta que una simple invitación a una mujer a tomar una copa sería una forma de “acoso sexual”, según una nueva encuesta de YouGov.
No, esto NO es una sátira.
Después del trágico asesinato de Sarah Everard, de 33 años, en Londres, los manifestantes han exigido una serie de medidas draconianas para combatir la “misoginia”, incluido un toque de queda a las 6 pm para los hombres.
Estas mismas personas también están pidiendo que la “misoginia” sea considerada un crimen de odio, una propuesta ridícula que NO disuadirá a los posibles asesinos y violadores de cometer sus atroces actos.
Summit.news informa: Absolutamente ninguno de estos activistas exigió que se cambiara la ley para que las mujeres que lleven spray de pimienta no sean castigadas con la misma sanción legal que recibirían por portar un arma, que es actualmente la ley en el Reino Unido.
El pánico moral es ahora tan irracional que las diferencias se están borrando hasta el punto de que el comportamiento normal de los hombres hacia las mujeres se está tratando al mismo nivel que la actividad criminal depredadora real.
Una encuesta de YouGov preguntó a los encuestados: “¿Qué formas potenciales de acoso sexual experimentan con más frecuencia las mujeres europeas?”
Una de estas formas de “acoso sexual” es “pedirte una copa”. Esto se equipara a los hombres que muestran sus genitales y agreden físicamente a las mujeres.
Uno se pregunta cómo van a conocerse los hombres y las mujeres si pedir una cita a una mujer se considera una forma de acoso misógino.
Sin embargo, estas opiniones no solo las comparten las mujeres.
Los hombres intimidados por el progresismo han perdido toda su confianza e inclinaciones masculinas naturales, una encuesta realizada por The Economist en 2017 encontró que un 25% de los hombres millennials en los Estados Unidos piensan que “pedir a una mujer una cita para tomar una copa” es una forma de acoso sexual.
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