Milagros Boyer – Panampost

El régimen de Venezuela dio a conocer este sábado un aumento del salario mínimo, el cual anteriormente se encontraba en 0,63 centavos de dólar, según la tasa oficial del Banco Central. Sin embargo, el incremento fue igual de pírrico que lo números actuales, pues al cambio el sueldo mensual integral (con bono de alimentación) de un trabajador quedaría en 3,55 dólares.

Para tener una mejor perspectiva de lo ínfimo del incremento salarial es necesario recordar que en Venezuela un kilogramo de carne puede costar alrededor de 3,75 dólares. Esto debido a la hiperinflación, la escasez y la crisis económica que golpea al país, reseña Infobae.

Venezuela actualmente transita su cuarto año de hiperinflación y octavo en recesión. Por lo tanto, un aumento de esta naturaleza se muestra como algo minúsculo para llenar la canasta alimentaria que se ubica en 289,9 dólares. Al tipo de cambio actual, este costo equivale a unos 560 millones de bolívares.

Sin embargo, el régimen es ciego ante estos números. Hoy hizo el anuncio en medio de un acto que se realizó con motivos del Día del Trabajador. Con bombos y platillos el titular chavista de la cartera de Trabajo, Eduardo Piñate, dijo que se aumentó 288,8 % respecto al vigente de 1,8 millones. Del mismo modo, informó que se complementa con un bono de alimentación de 3 millones de bolívares. Así se llega a un ingreso mínimo de 10 millones de bolívares, es decir, 3,55 dólares.

Medidas contraproducentes a corto plazo

Los expertos en economía destacan lo hueco de esta decisión si se toma de manera aislada. Al respecto, el economista César Aristimuño indicó a AFP que “mientras no generemos una política industrial, social, económica de crecimiento, será muy difícil que a través del salario vayamos a dar poder de compra a los venezolanos”.

Y es que, por años Maduro ha urdido una serie de artimañas que pasan por establecer un salario mínimo paupérrimo a cambio de la entrega de bonos a través del carnet de la patria, la principal herramienta de control social del régimen.

Sin embargo, la población venezolana no se amilana. Hoy, aprovechando la ocasión del 1 de mayo, trabajadores de distintos gremios en Venezuela exigieron este sábado salarios “dignos” y vacunación masiva contra el COVID-19 en medio de la “crisis humanitaria” y la pandemia que, según cifras oficiales, ha dejado 197.683 contagios y 2136 muertes en el país.

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