El petróleo de Venezuela e Irán sigue llegando a las refinerías de China de forma oculta. La ruta a través e Malasia mantiene su actividad.
Hasta ese país del sudeste asiático llegan los tanqueros cargados de crudo desde puertos iraníes y venezolanos. Allí se efectúan las transferencias de barco a barco (ship to ship, en inglés). Y el petróleo luego es renombrado.
El método no es nuevo. Desde el año pasado se ha reportado y documentado en medios de comunicación.
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Ahora, un nuevo gráfico compartido en Twitter por el experto petrolero Armand Delon, desnuda el alcance de este mecanismo usando un indicador que cuantifica el volumen de esa actividad.
En marzo las importaciones de China de petróleo proveniente de Malasia alcanzaron los 2.300 millones de dólares. Casi cuatro veces de lo que exportaba el año pasado.
Desde entonces, sus envíos de crudo a las refinerías chinas ha estado en una tendencia al alza. Al contrario, las ventas iraníes de petróleo decrecieron hasta casi desparecer a principos de este año.
Malasia es apenas un pequeño productor de petróleo, que además importa el hidrocarburo de otros países.
Otras evidencias
Pero hay otras pruebas circunstanciales que dejan al descubierto el paso de petróleo venezolano por Malasia. El mes pasado un accidente cerca de un puerto chino con buque petrolero proveniente de Malasia reveló la posibilidad de que se tratara de crudo venezolano.
Un tanquero llamado A Symphony, cargado con un millón de barriles de crudo extra pesado, colisionó con un buque de carga cerca de Qingdao, en China. Tras el accidente se produjo un derrame petrolero. Las características del hidrocarburo lo vinculaban con los crudos extrapesados que exporta Venezuela.
El armador del barco salvó su responsabilidad negando conocer el origen del crudo que se derramó «La carga a bordo del A Symphony se cargó en Asia», dijo la compañía.
«La estricta política de cumplimiento de NGM Energy sigue siendo que las embarcaciones que administra no transportan carga venezolana sin la autorización de las autoridades de sanciones de EEUU«, agregó.
El buque A Symphony había sido cargado en Malasia. Ese país, junto a Indonesia, Tailandia y Singapur, tiene soberanía sobre el estrecho de Malaca. Esa es una ruta de gran importancia pues conecta el comercio marítimo entre el océano Índico con el mar de China Meridional.
En esa zona, las autoridades Indonesias retuvieron a dos embarcaciones petroleras que se encontraban de forma ilegal haciendo una transferencia de petróleo de barco a barco y se sospecha que la carga era crudo venezolano.
Una forma de ocultar el petróleo
Pero no solamente es Malasia. En la ruta de petróleo desde Occidente hacia China también está Singapur. En ese país, Bloomberg investigó el año pasado cómo hacían las empresas de transporte martítimo para esconder el origen de petróleo venezolano antes de exportarse a China.
El medio hizo seguimiento un crudo extraído por PDVSA e identificado con el nombre Hamaca. El petróleo se cargó en Venezuela pero luego fue tratado con aditivos químicos frente a las costas de Singapur.
Reapareció posteriormente en el mercado con el nombre “Singma”. Aunque, a veces, simplemente lo renombran como mezcla bituminosa. Swissoil Trading SA fue la empresa encargada de ejecutar ese movimiento.
En un correo electrónico que vio Bloomberg, un comerciante de Swissoil que comercializa “Singma” instaba a una contraparte a violar una práctica estándar de la industria. Le aconsejaba no mantener la documentación de carga original en el buque que transportaba el petróleo.
Esa empresa vendió y entregó el año pasado a China al menos 11.3 millones de barriles de petróleo venezolano, escondiendo su origen.