Por Santiago Las Heras – gaceta.es
Argentina ha optado por la abstención ante la condena en la OEA de la violación a los derechos humanos de la dictadura de Nicaragua.
El Consejo Permanente del organismo internacional ha sido convocado a una sesión virtual extraordinaria para tratar la situación de Nicaragua a petición de Brasil, Canadá, Chile, Costa Rica, Estados Unidos, Perú y Paraguay. Allí se ha votado por condenar la detención arbitraria por parte del Gobierno de Daniel Ortega de 13 líderes opositores y candidatos presidenciales.
Por resolución de la mayoría, se ha condenado “inequívocamente” la detención, hostigamiento y restricciones arbitrarias impuestas a candidatos presidenciales, partidos políticos y medios independientes en Nicaragua», al tiempo que se ha reclamado la “liberación inmediata de los candidatos presidenciales y de todos los presos políticos”.
La resolución ha sido avalada por 26 países miembros, cinco abstenciones (Argentina, México, Honduras, Belize y Dominica) y tres votos en contra (Nicaragua, San Vicente y Granadinas, y Bolivia).
Tal y como ha sucedido en los últimos acontecimientos regionales, Argentina ha sostenido su postura junto a México que es su principal aliado en la región.
Así, partidos de la oposición han lamentado la abstención del gobierno kirchnerista: “Otra vez Argentina guarda silencio frente a violaciones a los DDHH. En este caso absteniéndose de votar en la OEA la condena al régimen de Ortega que arrestó, entre otros, a cuatro aspirantes a la presidencia anticipando que las próximas elecciones carecerán de toda legitimidad”, ha señalado el expresidente Mauricio Macri a través de las redes sociales.
Tras la votación a favor de la condena, el embajador argentino, Carlos Raimundi, ha leído una declaración conjunta de los gobiernos de Argentina y México donde se rechazaba la resolución en contra del régimen de Ortega y Murillo alegando que «se trata de una intromisión a los asuntos internos del país centroamericano».
«No estamos de acuerdo con los países que, lejos de apoyar el normal desarrollo de las instituciones democráticas, dejan de lado el principio de no intervención en asuntos internos, tan caro a nuestra historia. Tampoco con la pretensión de imponer pautas desde afuera o de prejuzgar indebidamente el desarrollo de procesos electorales. En este contexto, no nos fue posible acompañar el proyecto de resolución puesto a consideración hoy en el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos”, ha expresado el representante argentino en la OEA.
“Estamos convencidos de que esta situación será superada por las y los propios nicaragüenses, resguardando la convivencia pacífica, la división de poderes, el respeto a las minorías, las garantías constitucionales y, en general, el pleno respeto de todos los derechos humanos”, ha finalizado.
Por su parte, el Diputado opositor y jefe del interbloque de Juntos por el Cambio, Mario Negri, ha denunciado que la política internacional del Gobierno “lleva a Argentina al peor de los mundos. Primero decidieron hacer de cuenta que Maduro no violó los DDHH de miles de venezolanos». «Hoy en la OEA evitaron condenar la persecución del régimen de Ortega a opositores en Nicaragua. Alarmante».
Por su parte, el diputado Waldo Wolff compartió un video del embajador argentino ante la OEA, Carlos Raimundi, y destacó la contradicción del oficialismo: “dice que repudiaríamos persecución de opositores y violación DDHH en Nicaragua pero nos oponemos a opinar al respecto. Que se arreglen solos. Qué triste ser lo mismo que dicen combatir, Embajador”.