Fuente: Epoch Times en español
En el mes de junio el régimen comunista chino arrestó y allanó casas de practicantes de Falun Dafa por todo el país, previo a la próxima celebración de su centenario, el 1 de julio.
El Partido Comunista Chino (PCCh) celebrará el próximo mes el centenario de su fundación. Para “mantener la estabilidad social”, la cual es una frase utilizada por el régimen para justificar su gobierno totalitario en China, el PCCh anunció en junio una serie de controles estrictos sobre el pueblo, especialmente en Beijing, la capital del país.
Los practicantes de Falun Dafa —una práctica espiritual tradicional china de la escuela Buda también conocida como Falun Gong, que enseña los valores de Verdad, Benevolencia y Tolerancia— están entre los objetivos que el régimen quiere controlar.
Desde el 1 de junio, la información que emerge de los practicantes indica que la policía local ha estado registrando sus hogares. Sus propiedades privadas han sido confiscadas y algunos policías incluso han detenido a familiares que no son practicantes.
“Condenamos todas las formas de persecución del PCCh [a los practicantes de Falun Dafa]”, dijo a The Epoch Times Erping Zhang, portavoz del Centro de Información de Falun Dafa en Nueva York, el 17 de junio.
“La persecución del PCCh es continua desde julio de 1999. No hay indicios, hasta ahora, de ningún cambio de política por parte del PCCh por lo que seguimos siendo testigos de la despiadada campaña de persecución contra los practicantes de Falun Gong en China”, dijo Zhang. “Seguimos pidiendo a las personas de buena conciencia de todo el mundo que se manifiesten contra la violencia del PCCh sobre Falun Gong”.
Detenciones a gran escala
El 10 de junio, el Departamento de Policía Municipal de Mudanjiang, en la provincia nororiental china de Heilongjiang, ordenó a la policía de los seis condados y a cuatro distritos de la ciudad que arresten a los practicantes de Falun Dafa en sus casas.
El régimen dijo que las detenciones formaban parte de una campaña bautizada como “1 de julio de seguridad”.
En un período de 36 horas, la policía detuvo a 28 practicantes de Falun Dafa en la ciudad, acosó a otros seis y confiscó teléfonos móviles, ordenadores, impresoras, libros, dinero en efectivo e incluso tarjetas bancarias de sus hogares, informó Minghui.org, un sitio web dedicado a documentar la persecución a Falun Dafa en China.
A las 3 de la mañana del 10 de junio, varios policías irrumpieron en la casa de Guo Libin, practicante de Falun Dafa que vive en Hailin, una ciudad a nivel de condado, en Mudanjiang. Ellos detuvieron a Guo y a su esposa, tomaron la tarjeta bancaria del hijo y también allanaron la casa de su hermana, incautando un home theater, teléfonos celulares y libros.
A las 8 de la mañana, los policías del distrito de Aimin contrataron a un cerrajero e irrumpieron en la casa de la practicante Chen Yanwei cuando estaban con su familia dentro de la casa. Arrestaron en el lugar a Chen y a su hermana Chen Yanfu.
En algunos casos, la policía llegó a utilizar gas pimienta contra practicantes, cuando ellos intentaban proteger sus pertenencias.
En la ciudad de Dalian, en la provincia nororiental china de Liaoning, 29 practicantes de Falun Dafa y al menos seis de sus familiares no practicantes también fueron arrestados en sus hogares entre el 1 y el 3 de junio, como parte de la campaña del régimen “Seguridad del 1 de julio”. A su vez la policía de la provincia oriental china de Shandong llevó a cabo sus propias redadas en hogares de practicantes de Falun Dafa como parte de la campaña.
Minghui.org también informó de que se habían producido detenciones similares en las ciudades de Beijing y Tianjin, y en Sichuan, Guangdong, Gansu, Hebei, Yunnan y en una docena de otras provincias.
Miedo a perder el poder
El régimen chino puso en marcha su despiadada persecución para erradicar Falun Dafa en julio de 1999, y se calcula que en los últimos 22 años millones de practicantes han sido detenidos, torturados e incluso asesinados.
La nueva campaña relacionada con el centenario tiene más motivos, además de la continua persecución.
“El régimen del PCCh detuvo a los practicantes de Falun Dafa, a los peticionarios, a los activistas de la democracia e incluso a los ultraizquierdistas en los que no confían, antes del centenario”, dijo a The Epoch Times Tang Jingyuan, comentarista de asuntos chinos con sede en Estados Unidos, el 17 de junio. “Es porque el líder chino Xi Jinping y las autoridades de Beijing tienen miedo de perder el poder”.
Tang señaló que el régimen quiere consolidar su dictadura y Xi desea ansiosamente mantener su posición totalitaria.
“En las últimas décadas, los practicantes de Falun Dafa revelaron las persecuciones que sufrieron en China y expusieron los crímenes que cometió el PCCh frente a los llamados para poner fin a la persecución, dentro y fuera de China. Esto asusta al PCCh”, dijo Tang.
“El PCCh quiere silenciar a los practicantes de Falun Dafa intensificando la persecución y deteniendo a tantos practicantes como sea posible. Pero la historia le ha dicho al PCCh que las personas que tienen creencias, como los practicantes de Falun Dafa, no tienen miedo del mal. Harán lo que crean que es bueno para los demás y para la sociedad”. Fuente: The Epoch Times en español