Traducido de BigLeaguePolitics.com por TierraPura.org
El fundador de Tesla, Elon Musk, declaró su lealtad a la China comunista en un reciente tuit, indicando dónde están las intenciones de este tecnócrata globalista.
“La prosperidad económica que ha logrado China es realmente asombrosa, ¡especialmente en infraestructuras! Animo a la gente a visitarla y verla por sí misma”, escribió Musk en un tuit.
Su mensaje puede verse aquí:
Musk se ha reinventado a sí mismo como populista en los últimos años, pero tiene un largo historial de ser un estafador de empleos verdes que ha impulsado la agenda del cambio climático para llenarse los bolsillos.
Big League Politics informó sobre cómo Musk abandonó al ex presidente Donald Trump después de que éste retirara a Estados Unidos de los Acuerdos Climáticos de París:
“Algunos conservadores y libertarios se han enamorado del CEO de Tesla, Elon Musk, después de que el multimillonario reanudara las operaciones de fabricación de automóviles en Fremont, California, desafiando los decretos sobre el coronavirus de los funcionarios de salud del condado y del estado, pero los patriotas deberían ser cautos a la hora de coronar a Musk como un héroe.
La élite tecnocrática renunció al panel de asesores empresariales del presidente Donald Trump en junio de 2017, indignada porque el presidente tuvo la audacia de retirar a Estados Unidos del acuerdo globalista sobre el cambio climático de París. El pacto global sobre el clima exigía que Estados Unidos redujera sus emisiones anuales de carbono en un orden de magnitud, mientras que se mostraba indulgente con los países contaminantes en desarrollo, como India y China; de hecho, les daba licencia para aumentar sus emisiones de carbono.
Estados Unidos ha reducido sistemáticamente sus emisiones anuales de carbono cada año durante el mandato del presidente Trump, demostrando que la nación no necesita someterse a una burocracia globalista atada a la ONU para ser consciente y responsable con el medio ambiente.
La decisión de Musk de reabrir su negocio puede tener mucho mérito. Pero la élite vinculada a Silicon Valley, cuya empresa de transporte ecológico, fuertemente subvencionada, en general ha producido poco a pesar de recibir enormes subsidios del gobierno, está lejos de ser un héroe para los conservadores por su historial de alarmismo sobre el cambio climático.
Las empresas Tesla y SpaceX de Musk reciben cada año miles de millones en subvenciones del gobierno estatal y federal.”
Musk también se ha puesto en contra del Bitcoin en las últimas semanas, tirando de la toalla sobre la criptodivisa. También quiere perforar microchips en el cerebro de los humanos. Musk es uno de los globalistas más peligrosos que existen.
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