Traducido de BigLeaguePolitics.com por TierraPura.org
El ex presidente Donald Trump ha reconocido que uno de los mayores errores de su presidencia fue no tomar medidas suficientemente duras contra los terroristas de Black Lives Matter (BLM) en guerra con los valores estadounidenses.
Trump se sentó para una entrevista con Carol Leonnig y Philip Rucker para su libro, I Alone Can Fix It. Trump habló durante horas sobre una gran variedad de temas, y confirmó que su respuesta contra BLM era un gran arrepentimiento de su presidencia.
“Creo que si tuviera que hacerlo de nuevo, habría traído al ejército inmediatamente”, dijo.
Desgraciadamente, Trump escuchó a los liberales de su círculo íntimo, como su yerno Jared Kushner, y fue blando con BLM para complacer a los votantes de las minorías. Como resultado, el levantamiento terrorista se extendió por todo el país, permitiendo un genocidio civilizatorio por parte de una mafia de bajo coeficiente intelectual que ha elevado sin ayuda las tasas de crímenes violentos a las más altas de las últimas décadas.
Trump debería haber tomado ejemplo de líderes nacionalistas fuertes como el primer ministro húngaro Viktor Orban, que se ha negado a doblegarse ante el rechazo ignorante del mundo, como ha informado Big League Politics:
“El primer ministro húngaro, Viktor Orban, se ha manifestado en contra de la cobarde tendencia a arrodillarse durante los himnos nacionales en los eventos deportivos para demostrar su sometimiento racial a los terroristas de Black Lives Matter (BLM) y otros grupos de víctimas raciales”
Orban se pronunció al respecto tras una polémica futbolística en Budapest. Los hinchas húngaros se abuchearon después de que los jugadores de fútbol irlandeses se pusieran de rodillas en señal de servidumbre. El seleccionador de Irlanda, Stephen Kenny, dijo que esta reacción era “incomprensible”, pero Orban está en total desacuerdo.
“Si eres un invitado en un país, entiende su cultura y no la provoques”, dijo Orban durante una rueda de prensa. “No provoques al anfitrión… Sólo podemos ver este sistema de gestos desde nuestro punto de vista cultural como ininteligible, como una provocación”
“Los hinchas reaccionaron como suelen reaccionar a la provocación los que son provocados. No siempre eligen la forma más elegante (de reacción), pero tenemos que entender sus razones… Estoy de acuerdo con los aficionados”, añadió.
Este tipo de declaraciones son habituales para Orban, que dirige una administración orgullosamente “antiliberal” en Hungría, que en realidad “defiende los valores tradicionales conservadores, al tiempo que repele con éxito la subversión izquierdista”
Cuando Trump vuelva a gobernar en 2024 o antes, tendrá que aprender de sus errores e ir doblemente duro con este movimiento de alimañas humanas para devolver a Estados Unidos su gloria perdida.
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