Por Mamela Fiallo Flor – Panampost.com
La agenda que Netflix muestra actualmente, cuya parrilla de programación ha sido tachada como abiertamente de izquierda, ha terminado por espantar alrededor de 430.000 suscriptores de su plataforma de streaming en el segundo trimestre de 2021, tan solo entre Estados Unidos y Canadá.
Un éxodo de suscriptores que, entre otros factores, habría aumentado a causa de su contenido ideológico que toma cada vez mayor número de espacios. Una muestra de ello sería la participación del expresidente estadounidense Barack Obama y su esposa Michelle en el desarrollo de producciones para esta compañía.
Y es que los antiguos inquilinos de la Casa Blanca apuntan a los niños y cómo piensan sobre el gobierno y el compromiso cívico. Para ello, están creando una serie animada de Netflix con actuaciones musicales de artistas como Adam Lambert, Lin-Manuel Miranda y Janelle Monáe.
La pareja anunció que está convirtiendo la novela Exit West, obra que trata sobre migración y refugiados, en una película para Netflix. Esto formaría parte de su trato general con el transmisor, según reseña Breitbart.
La aventura que están por iniciar los Obama se suma a la serie de contenidos woke que han tomado cada vez más espacios en esta plataforma. Un ejemplo que se conoció con anterioridad fue el de la sociedad que conformó la plataforma de streaming con el académico de izquierda y defensor del «antirracismo», Ibram X. Kendi, para llevar a la pantalla tres de sus libros sobre teoría crítica de la raza.
En enero Netflix anunció que adaptaría tres libros de Kendi a series animadas, entre las que se incluye Antiracist Baby, la cual va dirigida a niños de preescolar y consistirá en una serie de videos musicales cortos animados para enseñar a los niños y sus cuidadores sobre el antirracismo. Sin embargo, a juzgar por los embates de la compañía en la bolsa, este plan no ha tenido buenos resultados.
«Netflix desangra sus suscriptores»
En vista que Wall Street ve las suscripciones como el indicador clave de la salud financiera de una empresa, la baja de suscriptores de la cadena de la «N roja» muestra un problema para el flujo de caja futuro de la empresa. Incluso, Financial Times fue más dramático en su descripción y anunció en un titular que «Netflix desangra a suscriptores en Estados Unidos y Canadá sin signos de recuperación»
A su vez, el precio forma parte crucial de la elección de los usuarios, sobre todo, porque ya no vale la pena el costo, pues al presentarse como una plataforma con un contenido sesgado, carece de diversidad en los mismos.
Por lo tanto, el Financial Times agregó que la compañía con sede en California ha decepcionado a los inversores, ya que los analistas habían pronosticado que Netflix agregaría 5.9 millones de suscriptores durante el tercer trimestre. Sin embargo, hasta el momento la proyección no supera los 3,5 millones.
Pero la empresa no ha reconocido su rol en la baja que se ha hecho más que evidente. Por el contrario, Netflix culpó de la pérdida de suscriptores a la estacionalidad y al gran tamaño de su base de clientes de América del Norte.
En una carta a sus accionistas adjudicó la baja al hecho que el «COVID ha creado algunos altos y bajos en el crecimiento de nuestra membresía». Asimismo, alegó que el contraste es marcado este año en comparación al anterior, dado que en el 2020 muchas personas estaban confinadas y por ende veían más Netflix.
Netflix financia campañas políticas de izquierda
Por otra parte, el partidismo de Netflix no se limita a su contenido, sus recursos también van a campañas políticas. De hecho, el codirector ejecutivo de esta plataforma, Reed Hastings, fue el mayor donante en mayo de este año para respaldar al gobernador demócrata de California.
De acuerdo con Político, Hastings hizo una donación de tres millones de dólares al gobernador Gavin Newsom para protegerlo de un intento del Partido Republicano de recuperar la gobernación, luego de 15 años fuera de ella. A su vez, tanto él como como el codirector ejecutivo, Ted Sarandos, respaldaron la candidatura de Joe Biden a la Casa Blanca.
La politización de la plataforma le está costando cada día más usuarios. En una reciente encuesta, un tercio de los suscriptores están planificando cancelar los servicios. Entre los encuestados que buscan cancelar sus servicios de transmisión, el 46 % dijo que se cancelará Netflix, reseñó Breitbart.
Hasta ahora el mayor escándalo que ha tenido en materia ideológica fue la película titulada Cuties, por la cual Netflix se disculpó por un provocativo póster promocional sobre una niña pre adolescente que «queda fascinada con un equipo de baile twerking«.
Como consecuencia, Netflix fue acusada en un tribunal de Texas y podría enfrentar cargos por distribuir material que equivale a pornografía infantil. El lunes 6 de octubre del 2020 Matt Schaefer, representante estatal republicano de Texas, reveló que un gran jurado ha acusado formalmente a Netflix de «promoción de material visual lascivo que representa a [un] menor».
La sexualización de menores incomodó a miles de usuarios, causando un gran éxodo en las suscripciones que sigue en aumento.