Fuente: Minghui.org
3. Cuerpo humano y energía cósmica
Los virus atacan a las personas a través de células infectadas, que cuentan con materiales genéticos como el ADN como sus componentes críticos. Por lo tanto, mejorar la inmunidad y evitar que las células se infecten se han convertido en temas candentes.
Uno puede pensar inmediatamente en varios tipos de alimentos, suplementos y medicamentos, que proporcionan energía a las células y pueden ayudar a estimular la inmunidad al ser digeridos por el cuerpo humano. Pero, ¿qué pasa si hay otros tipos de energía a nuestro alrededor que son mejores que los alimentos y los suplementos? De hecho, nuestro cuerpo humano es capaz de recibir esa energía no alimentaria, como se muestra en los experimentos de Peter Gariaev mencionados anteriormente.
Si es así, ¿podemos ajustar nuestros cuerpos, como sintonizar una radio en ciertas frecuencias, para recibir la energía beneficiosa que nos rodea, para mejorar nuestra inmunidad?
En discusiones anteriores, hemos visto que la mente humana puede afectar materiales genéticos como el ADN, lo que sugiere que podría ser posible que la intención de nuestra mente pueda ayudarnos a alinearnos con la energía cósmica y beneficiarnos de ella.
Ahora veamos dos incidentes que pueden darnos algunas ideas sobre cómo conectarnos con la energía cósmica.
Lectura de dedos
Lee Si-chen, profesor de ingeniería eléctrica en la Universidad Nacional de Taiwán, ha estudiado lectura de dedos desde 1988. A través de miles de experimentos, ha confirmado la validez y repetitividad de “leer” caracteres chinos con los dedos. Algunos sujetos con fuertes habilidades sobrenaturales tuvieron una precisión cercana al 100%. Algunas personas pueden preguntarse cómo los dedos pueden “leer” cuando usualmente usamos nuestros ojos para ver y leer cosas.
Primero expliquemos el mecanismo de ver un objeto con los ojos. Una vez que la luz visible llega a un objeto, transmite el mensaje del objeto. Cuando este mensaje se transmite a nuestro cerebro a través de los ojos, podemos ver el objeto.
Para la lectura de dedos, la energía biológica que transporta información sobre el objeto se transmite a nuestro cerebro a través de puntos de acupuntura y el sistema de meridianos. Por lo tanto, la lectura de los dedos y la lectura de los ojos son similares en el sentido de que ambas nos permiten “ver” cuando el mensaje de un objeto llega a nuestro cerebro. La diferencia radica en el canal por el que se transmite el mensaje.
Uno de los resultados más impactantes se produjo en agosto de 1999, cuando el profesor Lee le pidió a su sujeto experimental que leyera con los dedos el carácter chino de “Buda”. Lo que el sujeto con habilidades sobrenaturales vio con sus dedos ya no eran unas letras, sino una luz deslumbrante. Más de diez científicos que estaban presentes se sorprendieron al escuchar lo que dijo el sujeto sobre la luz.
El experimento se llevó a cabo a doble ciego, sin que ni el evaluador ni el sujeto supieran que el carácter de “Buda” se había escrito en el papel que se enrollaba en una bola. Además, cuando la palabra “Buda” se escribió en tibetano, hebreo, birmano u otros idiomas que el examinador y el sujeto ni siquiera entendían, el sujeto aún veía fenómenos inusuales como la luz en todos los casos.
Para verificar aún más esto, el profesor Lee invitó a Sun Chulin, investigador del Instituto de Ciencias Humanas de la Universidad de Geociencias de China, a participar en el mismo experimento. Se sabía que Sun tenía habilidades sobrenaturales, y también vio una luz dorada brillante en todas las direcciones cuando se le pidió que leyera con los dedos la hoja de papel con la palabra “Buda” escrita en ella.
El profesor Lee también descubrió que incluso la notación fonética de la palabra “Buda” se presentaba como luz para los sujetos de sus experimentos. Esto muestra que la pronunciación correcta de la palabra “Buda” también podría conectarse con energía superior en otras dimensiones y producir resonancia. Por lo tanto, podemos inferir que cuando los cultivadores antiguos leían o recitaban escrituras u oraban, sus mentes, voces y palabras podían resonar con la energía superior del cosmos.
En otras palabras, es posible que la humanidad se conecte y resuene con energía superior en el universo a través de la mente y el lenguaje.
Milagro de una mujer de negocios en Nueva York
Esto ocurrió el año pasado. Osnot Gad es una mujer judía estadounidense que emigró a los Estados Unidos en la década de 1960. Ya tiene 73 años, está a cargo de un negocio familiar de joyería y suele viajar por todo el mundo en busca de piedras preciosas para sus joyas. El 12 de marzo de 2020, su hermano menor llegó de Manhattan y la visitó en Long Island durante el fin de semana. Una semana después de que su hermano se fuera, Gad se sintió mal, perdió el sentido del olfato y el gusto y apenas podía respirar.
Fue a un hospital el 21 de marzo y le dijeron que tenía síntomas de la infección por coronavirus. El médico le recomendó que se pusiera en cuarentena en casa y tomara Tylenol una vez cada cuatro horas. Las cosas empeoraron durante su cuarentena.
“No podía respirar”, recordó. “Cuando mi amiga Louise me llamó, le dije: ‘Ni siquiera puedo hablar’. Y mi voz se fue haciendo cada vez más débil. Lousie me dijo ‘¡Solo respira!’ pero apenas pude hacerlo”.
Louise luego le contó a Gad sobre Falun Dafa, un sistema de meditación basado en los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Ella compartió algunas historias de personas que se recuperaron milagrosamente de sus enfermedades al recitar las frases “Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno”. Ella le sugirió que Gad hiciera lo mismo.
Gad accedió a intentarlo. “En ese momento, no sabía qué hacer. El médico dijo: ‘No llames al hospital porque te conectarán a un ventilador’”, explicó, “Y yo no quería hacer eso”.
Gad dijo que seguía recitando las frases. Sorprendentemente, descubrió que las frases la ayudaron a respirar mejor.
Llamó a Louise y dijo que quienquiera que haya creado esas frases debe saber realmente cómo inhalar y exhalar. “Porque en tres días, aprendí a respirar y a no contener la respiración”, continuó. Dijo que las frases cambiaron por completo su nivel de energía. Ahora recita las frases cuando se va a dormir, se despierta, camina, tiene malos pensamientos o incluso cuando se siente deprimida.
“Me dije: ‘tienes que respirar correctamente, y así es como respiras’”, dijo, y agregó que Falun Dafa la salvó. “Tengo que estar muy agradecida por eso y tengo que estar muy agradecida por Louise. Quizás Dios la envió, Falun Dafa la envió… Ese es un gran regalo”, dijo.
Falun Dafa enseña a una persona a ser buena siguiendo los principios de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Sus principales enseñanzas se encuentran en el libro Zhuan Falun, y la práctica también incluye cinco ejercicios.
En China, decenas de millones de personas se han beneficiado de la práctica, tanto física como mentalmente. Temiendo la creciente popularidad de Falun Dafa, el exlíder del Partido Comunista Chino (PCCh), Jiang Zemin, lanzó una persecución a nivel nacional de la práctica en julio de 1999. Además de detener y torturar a los practicantes, el PCCh también ha fabricado numerosas mentiras para difamar a Falun Dafa e incitar el odio de la gente por la práctica. En junio de 2021, se ha confirmado que más de 4.600 practicantes perdieron la vida a causa de la persecución. Además, un gran número de practicantes se han convertido en víctimas de la sustracción forzada de órganos, pero se desconocen sus nombres ya que se negaron a revelarlos cuando fueron arrestados.
A pesar de la persecución en curso en China, Falun Dafa ha seguido atrayendo a nuevos interesados, tanto dentro como fuera de China. Esta es una clara indicación del poder de las palabras Verdad-Benevolencia-Tolerancia.
La historia de Gad muestra que las frases “Falun Dafa es bueno, Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno” deben tener una energía enorme, que no solo la ayudó a recuperarse de la infección, sino que también le permitió mantener la calma.
Los científicos aún no han podido descubrir qué frecuencias tienen las frases “Falun Dafa es bueno” y “Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno” o cómo podrían ser recibidas por el ADN. Pero sabemos que estas frases resonaron en las células humanas y evitaron la infección por coronavirus de Gad. De hecho, muchas personas también experimentaron milagros similares y sus historias se han publicado en el sitio web Minghui.org. Los sobrevivientes de infecciones dicen: “Fa Lun Da Fa Hao” (Falun Dafa es bueno) y “Zhen Shan Ren Hao” (Verdad-Benevolencia-Tolerancia es bueno) las Nueve Palabras Verdaderas [porque hay nueve caracteres chinos en las frases].
De hecho, Dong Yuhong, doctor en medicina en enfermedades infecciosas de una compañía farmacéutica suiza, y otros científicos han estudiado 36 casos de infección por coronavirus de seis grupos étnicos en seis países. Entre los once pacientes críticamente enfermos, diez se recuperaron por completo y uno vio una mejoría después de recitar las frases.
Resumen
Como se mencionó anteriormente, las emociones pueden afectar la salud. El ADN y las células humanas también pueden resonar con la energía cósmica. Cuando se alinea con la buena energía, el cuerpo humano se volverá más saludable. Los hallazgos científicos discutidos anteriormente han dado fe de esto.
Al recitar con sinceridad las dos frases mencionadas anteriormente, uno se alineará con la energía cósmica de Verdad-Benevolencia-Tolerancia. Apoyada por la paz y la energía positiva en el universo, la inmunidad de uno será fuerte y repelerá las enfermedades infecciosas, el estrés y la ansiedad.
Muchos fenómenos sobrenaturales no son misteriosos. La clave para ver a través de estos fenómenos es tener una mente abierta y visiones más amplias. Con esta llave, podemos abrir muchas puertas de la salud humana, la vida y el universo.
El mejoramiento personal y la cultivación tienen una larga historia, son muy profundos y trascienden la ciencia moderna. Todos los grandes sabios de la historia, a pesar de las diferentes escuelas y formatos religiosos que tomaron, esencialmente impartieron diversas formas de cultivarse y regresar al origen.
Volviendo al tema de la salud. Ninguna Pusa o Buda parece enfermo. ¿Porqué no? Porque un ser alineado con la energía cósmica habría superado el nivel que pueden alcanzar las enfermedades y, por lo tanto, nunca tendrán que preocuparse por la mala salud.