Fuente: Infobae
Hong Kong Watch -uno de los más importantes centros de derechos humanos de Hong Kong– denunció este lunes que la Universidad de Cambridge fue “infiltrada” por la empresa de tecnología Huawei, en lo que podría configurar un escándalo en el mundo académico que ya provocó titulares en la prensa inglesa. La revelación estuvo a cargo de uno de los directores de esa organización, Johnny Patterson, un experto en temas de seguridad la relacionadas con el régimen chino.
“Los vínculos de Huawei con el gobierno chino no son un secreto. Parece que el centro de investigación ha sido infiltrado por Huawei y la universidad debería investigarlo definitivamente. Los estrechos vínculos entre Huawei y la Universidad de Cambridge tienen graves implicaciones morales y de seguridad nacional”, indicó Patterson en diálogo con el diario The Times.
Patterson se refiere a la influencia que Huawei tiene sobre tres de los cuatro responsables del Centro de Gestión de China de Cambridge (CCCM, por sus siglas en inglés), radicado en la provincia de Shenzhen y fundado en 2018. Se lo considera un centro esencial de la innovación en materia tecnológica china. Su jefe, Yanping Hu, es un ex vicepresidente de la empresa paraestatal tecnológica, un hombre muy valorado por el Partido Comunista Chino (PCC).
La revelación del académico se dieron tras conocerse que 20 importantes universidades británicas habían aceptado más de 40 millones de libras esterlinas en financiación de Huawei y de empresas estatales chinas en los últimos años, señaló The Times. De acuerdo a ese diario inglés, la Universidad de Cambridge borró las referencias sobre Yanping Hu que figuraban en su web luego de que se hicieran consultas sobre la influencia de la corporación en la casa de altos estudios.
El CCCM fue fundado por el profesor Christoph Loch, Tian Tao -es asesor principal de Huawei y hombre de estrecha confianza del CEO de la compañía, Ren Zhengfei-, Peter Williamson -un académico de renombre y defensor de tecnológica en la prensa internacional- y Eden Yin, coautor de “Huawei, ¿cómo podemos liderar el camino?”.
El caso de Williamson es particular. Además de actuar como defensor de la corporación de Beijing– encabeza también el Centro de Diálogo sobre Cuestiones Globales en el Jesus College, que según reveló también el diario The Times recibió una subvención de 200.000 libras del régimen chino y otras 155.000 libras de patrocinio de Huawei.
Uno de los críticos de esta influencia o infiltración, Iain Smith, señaló ayer que las universidades británicas se han vuelto “muy dependientes del dinero chino”. “El gobierno necesita urgentemente una investigación sobre la dependencia del Reino Unido de China en toda una serie de instituciones y empresas”, dijo el dirigente conservador.
Huawei y el régimen chino
Mientras en el escenario internacional China obra para que sus redes de telecomunicaciones se conviertan en el nuevo estándar global, en el plano interno advierte sobre los riesgos de depender de la tecnología extranjera, un doble discurso que esconde las reales ambiciones del régimen de Xi Jinping. Al mismo tiempo, busca influir de manera solapada en las principales usinas intelectuales del mundo mediante su interminable financiación.
La estrategia china, que tiene las redes 5G de Huawei como punta de lanza, queda en evidencia en las declaraciones que el proprio presidente chino y otros altos funcionarios han hecho sobre el tema, según un reciente informe de Brookings Institution titulado China como una gran potencia cibernética: las dos voces de Beijing en las telecomunicaciones.
Desde su génesis, Huawei está signada por su impronta militar. Su fundador, Ren Zhengfei fue miembro del Ejército Popular de Liberación (PLA) durante décadas. En 1978 se unió al Partido Comunista. En la fuerza, trabajó siempre en el área de innovación y ciencia, su gran pasión, donde se destacó hasta que cumplió su ciclo. En 1982 se radicó en la provincia de Shenzhen, cerca del mayor centro financiero de Asia, Hong Kong. Cinco años después concretaría su sueño al fundar la corporación tecnológica más importante del continente.
u crecimiento estuvo impulsado, de acuerdo a múltiples denuncias, por el robo de información confidencial de compañías que competían en el sector.
Pero el amor de Ren por el ejército no mutó y la colaboración fue permanente entre ambos actores. De acuerdo con una investigación hecha por Bloomberg, el acuerdo involucra investigaciones en las que participan empleados de la corporación y uniformados. “Durante la última década los trabajadores de Huawei han formado equipo con miembros de varios órganos del Ejército Popular de Liberación en al menos diez emprendimientos de investigación que abarcan desde inteligencia artificial hasta comunicaciones por radio”, advierte el medio. Ese vínculo continúa imperturbable. Huawei es China. O más preciso: Huawei es el régimen chino y el Ejército chino.