Fuente: La Gaceta de la Iberosfera
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha celebrado este sábado la ‘Marcha de la paz’, para conmemorar la Revolución Húngara de 1956 contra el régimen comunista. Ante decenas de miles de simpatizantes, el mandatario ha pronunciado un discurso en el que ha insistido en la soberanía de la nación, en la lucha contra la propaganda LGTB y en el que ha reafirmado que no cederá ante el rodillo globalista que pretende imponer la Unión Europea.
«Los altos dignatarios querían doblegar a los húngaros y convertirlos en europeos, en liberales (…) querían decirles a los ciudadanos de Hungría y Polonia cómo vivir», ha acusado Orbán.
El mandatario húngaro ha invitado a sus compatriotas a «levantarse por su patria, su familia y su cultura, y por la libertad de cada día». «¡Cuando llegue el momento, plantaros frente a vuestros hogares y defendedlos!», ha apelado.
Así mismo, ha anunciado la celebración de un referéndum y ha insistido en que Hungría «será el primer país de Europa que parará la agresiva propaganda LGTB«. «Protegeremos a nuestros hijos», ha incidido Orbán.
Al acto en el centro de Budapest han acudido ciudadanos de todos los rincones del país, así como de Rumanía, Polonia e Italia en cientos de autobuses para celebrar el aniversario de la Revolución Húngara de 1956, brutalmente reprimida por las tropas soviéticas.