Fuente: El American
Este lunes 1 de noviembre, durante su ponencia en la National Conservatism Conference, el senador republicano Marco Rubio explicó por qué cree que “el candidato Joe Biden” tenía una agenda distinta a la que ahora lleva adelante como presidente.
“La agenda del candidato Joe Biden es muy distinta a la del presidente Joe Biden”, afirmó Rubio. “El candidato Biden prometió reconstruir mejor, el presidente Biden ha apostado su presidencia a reconstruir socialismo”.
El senador de origen latino argumentó que las tácticas políticas empleadas por la administración demócrata han sido utilizadas “durante siglos” por dictadores marxistas para llevar a cabo sus planes, y que ahora se utilizan para “dominar y destruir nuestro país”.
“A niños que ni siquiera tienen edad suficiente para vestirse por cuenta propia se les enseña que su color de piel los convierte automáticamente en opresores u oprimidos”, apuntó Rubio, y agregó que las promesas de “equidad y justicia” suelen ser muy populares “hasta que la gente entiende lo que realmente significan”.
Rubio estima que Estados Unidos enfrenta un “esfuerzo sistémico” para “desmantelar la cultura, la sociedad, las tradiciones, la economía y el estilo de vida” de los americanos.
“Deberíamos dejar de usar los dólares de la jubilación de los americanos para financiar las ambiciones de China”.
Reviviendo el patriotismo corporativo
“Las compañías tecnológicas se han convertido en ejecutoras, censurando las noticias que no les gustan y silenciando a quienes se atreven a hablar”, dijo Rubio, quien agregó que estas empresas se encargan de “boicotear” a los estados que aprueban leyes que no son lo suficientemente “woke”.
El cubano americano destacó la necesidad de formar un “movimiento conservador” que sea capaz de defender la libertad individual, proteger la cultura y valores americanos, y promover el capitalismo: “Lo que necesitamos es un capitalismo de bien común en el que los mercados estén aquí para servirnos”.
Además, Rubio apuntó directamente al Partido Comunista de China como un enemigo que ha conseguido utilizar a las propias corporaciones americanas para hacer lobby en Washington en favor de políticas socialistas que no sirven a los intereses de Estados Unidos.
“Hoy en día, muchas de nuestras corporaciones más importantes están dirigidas por personas que no se consideran ciudadanos americanos, se consideran ciudadanos del mundo (…) y no sienten ninguna obligación con Estados Unidos ni con nuestros intereses nacionales”, dijo Rubio.
El senador continuó: “las grandes corporaciones no son nuestras aliadas en la lucha contra el socialismo”, y destacó la importancia de “revivir el patriotismo corporativo” de las empresas americanas. Uno de los pasos a seguir, según su juicio, es poner la responsabilidad sobre los hombros de esas corporaciones.
“La carga debe recaer en la empresa, para demostrar que actúan en el mejor interés de los accionistas”, estimó Rubio. “Deberíamos exigir a las empresas que revelen a sus inversores y que rindan cuentas; que los miembros de las juntas no tengan ningún conflicto de intereses”.
“En lugar de revelar cuán obedientes están con la agenda ambiental de la izquierda radical, hagamos que las empresas le digan al público cuánto invierten en contratar y capacitar a trabajadores americanos”, pidió.
La opinión de Rubio sobre la división política
El senador Rubio se refirió a la división política que atraviesa Estados Unidos y dijo que ya no se trata de una cuestión ideológica entre liberales y conservadores, sino de un conflicto entre “la locura y el sentido común”.
“No hace mucho nuestra política estaba dividida entre liberales y conservadores (…) Ya no: la línea divisoria en nuestra política ahora es entre locura y normalidad, entre locura y sentido común”, dijo Rubio.
“Es una locura obligar a la abrumadora mayoría de americanos a adoptar cambios en el idioma inglés o aceptar la interrupción en nuestras escuelas para adaptarse a las demandas de una minoría minúscula”, continuó. “Es una locura que a nuestros niños se les enseñe que deben avergonzarse de la historia de su país”.
El republicano destacó que la verdadera lucha no está en los impuestos contra los millonarios sino en las pequeñas minorías “radicales e increíblemente poderosas” que luchan por desmantelar el sentido común que se ha construido la humanidad en los últimos 5,000 años.
Finalmente, Rubio señaló al socialismo como “el modelo económico por el que innumerables personas arriesgan su vida y huyen en balsas improvisadas”, y dijo que, “a pesar de nuestros problemas” millones de personas vendrían a Estados Unidos si tuvieran la oportunidad.
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