Por Oriana Rivas – Panampost.com
Presiones internas están acechando a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos por el papel que está desempeñando Rochelle Walensky, su directora desde enero de 2021. Desde que asumió el cargo sus declaraciones han generado confusión e incluso alarma. Todavía los estadounidenses recuerdan cuando en marzo del año pasado dijo que tenía «miedo» por un repunte de casos, siendo ella una autoridad en materia sanitaria y en parte quien coordina los esfuerzos para mantener segura a la población.
Episodios como este han ocurrido varias veces y para enmendar errores, Walensky pidió consultoría en medios, según información que trascendió recientemente en portales de EE. UU. La falta de coherencia necesitaba correcciones urgentes. Información poco precisa también afecta a la administración de Joe Biden, incluyendo a Anthony Fauci, el principal asesor médico y Vivek Murthy, cirujano general de EE. UU.
Tanto Fauci como Murthy criticaron la reciente modificación a la guía de los CDC que acorta el periodo de cuarentena en los contagiados asintomáticos. No se indicó la necesidad de una prueba de antígenos al finalizar dicho periodo y eso generó incomodidades. Las razones de los cambios podrían inclinarse más a lo político y económico que a la ciencia, según algunos científicos de los CDC citados por CNN, evidenciando que sobran las críticas internas.
La consultora que estaría trabajando con la funcionaria sería Mandy Grunwal, la asesora de medios para el Partido Demócrata. No es para menos. El actual gobierno insiste a los ciudadanos para la aplicación de vacunas y presiona con mandatos de obligatoriedad mientras que Walensky había dicho en agosto pasado que las vacunas «no pueden prevenir la transmisión».
75 % de fallecidos por comorbilidades
Los gobiernos del mundo, entre estos el estadounidense, comunican actualmente las cifras de contagios con alarma ante la expansión de la variante ómicron. El lunes 3 de enero se registraron 1.082.549 nuevos casos desde el inicio de la pandemia. El viernes siguiente se reportaron 900.832 nuevas infecciones de Covid-19 y 2615 muertes en EE. UU., según datos de la Universidad Johns Hopkins, citados por EFE.
Sin embargo, la directora de los CDC reveló este 10 de enero que más del 75 % de las “muertes por COVID-19” ocurrieron en personas “que tenían al menos cuatro comorbilidades». Por lo que de acuerdo a Walensky «estas son personas que no se encontraban bien».
La reacción fue inmediata, Donald Trump Jr, el hijo del expresidente Donald Trump, aseguró que «ellos (el gobierno) sabían esto en 2020». Y que según fuentes recibió comentarios como «un tipo atropellado por un autobús fue marcado como muerte por COVID porque también tenía COVID, pero no puedo decir nada».
La funcionaria trató de resarcirse con un mensaje en Twitter donde aseguraba que «se dedicó a la medicina, específicamente al VIH, y a la salud pública para proteger a quienes estaban en mayor riesgo». Pero las contradicciones han estado a la hora del día.
Durante declaraciones a varios medios desestimó los números de la juez de la Corte Suprema, Sonia Sotomayor, sobre «más de 100.000 niños en ‘condición grave’ por COVID-19». La instancia judicial se enfrenta en plena revisión de mandatos de vacunas de Biden, en un proceso llevado adelante por varios estados de tendencia republicana y empresas. El número real es de menos de 3500 niños en hospitales con coronavirus, afirmó Walensky a Fox News Sunday e insistió en la vacunación.
Nueva guía sin consenso de expertos
La directora de los CDC no se ha salvado de la mala prensa producto de sus contradicciones. La Casa Blanca se ha negado a dar declaraciones mientras que prevalece la «insatisfacción» entre asistentes administrativos y expertos externos en salud pública, respecto a las formas en que los CDC «han comunicado sus decisiones a medida que la pandemia entra en lo que los funcionarios ven como una nueva fase», apuntó CNN.
Desde Washington parece haber «frustración» con los CDC por sus mensajes de pautas de salud pública, agregó el medio. Walensky habría elaborado la nueva guía basada en asesores superiores y a través de la investigación de los CDC y la posterior consulta con socios. Tal como indicó The Washington Post, «Rochelle Walensky no es buena en esto».
Resta ver si la Administración Biden tomará alguna posición clara al respecto.