Fuente: La Gaceta de la Iberosfera
La complicidad del Gobierno de Estados Unidos con el chavismo se está incrementando en este 2022, a la vez que avanza la expansión del comunismo en Iberoamérica tras la reciente ascensión al poder de líderes comunistas como Gabriel Boric en Chile, Pedro Castillo en Perú, o Xiomara Castro en Honduras.
Además de las negociaciones que han tenido lugar esta semana entre altos funcionarios de EE.UU. y el tirano venezolano, Nicolás Maduro, en el mes de febrero tuvo lugar otro acercamiento entre los demócratas estadounidenses y el Foro de Sao Paulo que ha pasado desapercibido.
El 17 de febrero, el senador demócrata Bernie Sanders envió una carta junto a otros congresistas y senadores dirigida al Secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, en la que instaban a la Administración Biden a respaldar sin titubeos a la presidente chavista.
Así, tal y como ha denunciado la periodista del Wall Street Journal, Mary Anastasia O’Grady, los demócratas estarían buscando mejorar su relación con Honduras para respaldar a Castro en su deseo de imponer una agenda chavista en la nación centroamericana.
«El nuevo Gobierno de Castro, la sociedad civil independiente y los movimientos sociales deben apoyar su agenda, incluyendo el fortalecimiento de la protección de los Derechos Humanos de las comunidades indígenas y afro-indígenas, de los pequeños agricultores, de las mujeres y de las personas LGBTQI», dicen en la misiva los integrantes del Partido Demócrata.
En el texto, también se critica al expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, al que se acusa de corrupción –está a punto de ser extraditado a Estados Unidos inculpado por narcotráfico–, y se pide a Biden que ayude a Castro en su lucha contra la corruptela en el país. Sin embargo, una de las primeras medidas que ha aplicado la nueva líder hondureña al llegar al poder ha sido la aprobación de una ley de amnistía por corrupción durante la administración del expresidente Manuel Zelaya, su marido.
En otro de los puntos de la carta, los demócratas alientan una intervención de EE.UU. en la política de Honduras. Así, piden a Biden que brinde el respaldo «esencial» «para superar la oposición interna a [su] agenda de reformas por parte de sectores del Congreso Nacional, el poder judicial y las fuerzas de seguridad de Honduras».
Esta no es la primera muestra de la cercanía que existe entre el Partido Demócrata y la presidente respaldada por el Foro de Sao Paulo. En enero, la vicepresidente Kamala Harris, mantuvo una reunión con Castro, a quien le reconoció que su ascenso a la Presidencia suponía un «cambio positivo» para el país centroamericano.
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