Fuente: childrenshealthdefense.org
Un comandante del Cuerpo Médico del Ejército de los Estados Unidos fue sancionado por conceder a los miembros del servicio exenciones médicas al mandato de la vacuna COVID-19 del ejército, y su licencia médica de Texas está siendo investigada, según muestran los documentos judiciales.
El Dr. Samuel Sigoloff, demandante en una querella contra el mandato del ejército, detalló en una nueva moción judicial una serie de medidas disciplinarias adoptadas contra él. La declaración de Sigoloff se incluye en el apéndice de 140 páginas de la moción.
Sigoloff es uno de los varios demandantes en el juicio de los que solicitaron exenciones por razones médicas. Algunas de las razones que los demandantes enumeraron fueron el embarazo o formar parte de “poblaciones especiales” de alto riesgo.
La demanda, originalmente conocida como Doe et al. contra Austin, fue presentada por 18 miembros del ejército, contra el Departamento de Defensa de los Estados Unidos (” Department of Defense”, DOD por sus siglas en inglés) y la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (“Food and Drug Administration”, FDA por sus siglas en inglés).
En la última moción, presentada el mes pasado, los demandantes también impugnaron:
- La justificación del gobierno para imponer las vacunas con autorización de uso de emergencia.
- La existencia y/o disponibilidad en los Estados Unidos de la vacuna Comirnaty.
- La emisión de tarjetas de vacunación que indican que los miembros del servicio fueron vacunados con “Comirnaty”.
- Afirma que la vacuna de Pfizer-BioNTech autorizada para uso de emergencia es “intercambiable” con la vacuna Comirnaty de Pfizer con licencia completa.
A Sigoloff se le ordenó no hablar de COVID ni de las vacunas
En su declaración, Sigoloff esbozó la cronología de los acontecimientos que le llevaron a ser “expulsado temporalmente de forma inmediata”, lo que le impide ver pacientes.
Dijo que la razón principal por la que fue expulsado temporalmente fue “debido al hecho de que estaba ‘yendo en contra de la orientación del Secretario de Defensa’”.
A Sigoloff también se le “ordenó no hablar del virus COVID19 o de la vacuna [sic] mientras llevara uniforme y durante la jornada de trabajo, [lo cual es] una violación de mis derechos de la primera enmienda”.
Según Sigoloff:
- El 9 de septiembre de 2021, fue alertado por uno de sus pacientes de que había un problema con su exención médica, basándose en la determinación de la comandante de la clínica, la teniente Marie Carmona, de que todas las exenciones concedidas por Sigoloff eran “ahora consideradas inválidas.”
- Al doctor le dijeron que “debe notificar a todos los pacientes que las exenciones médicas ya no son válidas”. Según Sigoloff, se trata de una “normativa en la sombra” que representa “una desviación significativa del proceso normal”, pero afirmó que, no obstante, la cumplió.
- El 10 de septiembre de 2021, Carmona “prohibió el uso de la ivermectina para usos no contemplados en el prospecto”, una decisión que Sigoloff también calificó de “normativa en la sombra”.
- El 13 de septiembre de 2021, Sigoloff “fue expulsado temporalmente de forma inmediata por la teniente Carmona por presunta: conducta no profesional, difusión de información engañosa a los pacientes y distribución de cartas de exención de vacunas que caracterizan las vacunas como “terapia genética”.”
- Al día siguiente, el Secretario de Defensa publicó una normativa oficial sobre exenciones médicas. Sigoloff afirmó que “todo lo que él había proporcionado a los pacientes seguía esta normativa que refleja la política de AR40-562. Me retiraron de la atención a los pacientes por ir en contra de la normativa en la sombra”.
- El 16 de septiembre de 2021, Carmona publicó “una orden que entra en conflicto directo con la política oficial del [Secretario de Defensa] y el AR40-562”, poniendo así por escrito la normativa en la sombra.
- Al día siguiente, el teniente Noberto Rodríguez “envió un correo electrónico… que notificaba a todos los proveedores de servicios sanitarios la normativa en la sombra ahora establecida…”
A continuación se llevó a cabo una investigación, que dio lugar a una “amonestación” en el expediente de Sigoloff basada en “conclusiones de: conducta impropia de un oficial, incumplimiento de órdenes legales y comentarios poco profesionales que socavan el mando médico él notificó a los pacientes que sus exenciones médicas son ahora inválidas”.
Las recomendaciones que le hizo Carmona tras la investigación incluían, según Sigoloff, que no viera a pacientes menores de 17 años durante seis meses, y que se sometiera a “auditorías del 100% de las historias clínicas y tuviera encuentros con pacientes con supervisión durante seis meses.”
Sigoloff fue “destituido del cargo de director médico” y se le prohibió, mediante una orden de Carmona, hablar, hacer recomendaciones o atender a pacientes o temas relacionados con COVID durante un año.
Carmona ordenó además que si alguno de los pacientes de Sigoloff “tiene preguntas relacionadas con el COVID … debe ser remitido a otro proveedor con un traspaso de pacientes adecuado”.
Sigoloff fue “denunciado al ‘National Practitioner Data Bank’ (NPDB) tras 30 días de expulsión temporal”.
Un informe posterior de la NPDB “generó una queja” contra la licencia médica de Sigoloff en Texas. Según Sigoloff, ahora está siendo investigado por la Junta Médica de Texas como consecuencia de ello.
El 31 de enero de 2022 se incluyó en el expediente permanente de recursos humanos de Sigoloff un memorando de amonestación del oficial general.
En su declaración, Sigoloff señaló que la amonestación de su expediente fue retirada, y que esto es “una prueba de que la … investigación no pudo fundamentar adecuadamente ninguna de las afirmaciones contra mí cuando las refuté.”
Sigoloff dijo: “Un médico del Ejército ha investigado mi práctica de la medicina y sus conclusiones demuestran la grave negligencia del investigador o la difamación intencionada de mi carácter”.
Las solicitudes de exención médica del propio Sigoloff fueron denegadas
Antes de que el ejército le investigara, Sigoloff presentó una solicitud de exención médica para sí mismo frente al mandato de la vacuna COVID del ejército, lo que provocó una sesión de asesoramiento obligatoria.
Carmona le dijo que no aprobaría su solicitud, que fue denegada oficialmente por el oficial de policía Vu Nguyen, con quien Sigoloff no había establecido una relación médico-paciente.
Sigoloff presentó el 22 de septiembre de 2021 una solicitud de exención religiosa. Los militares no respondieron.
El 12 de noviembre de 2021, una prueba COVID positiva le llevó a solicitar una exención médica permanente sobre la base de la inmunidad previa. Esta solicitud fue rechazada inicialmente, según Sigoloff, y ahora está pendiente de recurso.
Por último, las reclamaciones de Sigoloff se extienden a la polémica relativa a la supuesta “intercambiabilidad” de las vacunas de Pfizer-BioNTech y Comirnaty.
Según Sigoloff, el 14 de septiembre de 2021 informó a Rodríguez de que la vacuna de Pfizer-BioNTech “no está aprobada por la FDA y no es la misma que la de Comirnaty”.
Ese mismo día, Rodríguez le entregó un memorando en el que se afirmaba que las dos vacunas eran “intercambiables”, mientras que al día siguiente, Sigoloff dijo que “se le dio la orden de ponerse Comirnaty” pero que “no había Comirnaty disponible ese día”.
Sigoloff aportó decenas de documentos en apoyo de sus afirmaciones sobre el procedimiento disciplinario al que se enfrentó.
El caso depende de la “intercambiabilidad”
En la nueva moción de los demandantes, ellos argumentan que el gobierno federal “no ha citado ninguna norma, decisión o práctica de la agencia que apoye las determinaciones de intercambiabilidad sin precedentes de los demandados”, y añaden que “Comirnaty parece [ser] la primera instancia” y que no existe ningún precedente judicial relevante.
La moción dice:
“El DOD y los Servicios Armados tratan las vacunas EUA ‘como si’ fueran legalmente intercambiables con las Comirnaty autorizadas, y citan esta determinación como la base legal para obligar a los Demandantes a aceptar una vacuna que tienen el derecho estatutario de rechazar y para castigarlos por su incumplimiento.
“Los demandantes han alegado que los Servicios Armados han interpretado la determinación de Intercambiabilidad de la FDA en el sentido de “intercambiabilidad legal” … y para exigir que todas las vacunas EUA sean tratadas como si estuvieran autorizadas, sin tener en cuenta el cumplimiento de la BLA.
“Al hacerlo, las Fuerzas Armadas actuaron sin autoridad legal, ya que sólo la FDA tiene la autoridad para tomar tales determinaciones o aplicar la PHSA [Public Health Service Act].”
“BLA” se refiere a las Solicitudes de Licencia Biológica, un procedimiento de la FDA que permite la aprobación por la vía rápida de ciertos medicamentos y que está contemplado en la Sección 112 de la Ley de Modernización de la Administración de Alimentos y Medicamentos de 1997, titulada “Aceleración del estudio y la aprobación de medicamentos por la vía rápida”.
“Children’s Health Defense” demandó en agosto de 2021 a la FDA por la autorización de la agencia para la vacuna Comirnaty.
CHD alegó que la FDA actuó de forma fraudulenta, argumentando que la concesión de la licencia era un clásico ejemplo del truco de “ofrecer una cosa y dar otra”, que permitía a Pfizer, a la administración Biden, al ejército estadounidense y a los empleadores exhortar a la gente a ponerse las vacunas “autorizadas” cuando, en realidad, las vacunas disponibles y que se administraban seguían siendo las de Pfizer-BioNTech con autorización de uso de emergencia.