Fuente: Trikooba
Científicos de la Universidad de Oxford y la organización benéfica Collateral Global han publicado un nuevo informe que demuestra que hubo fallos fundamentales en la forma de contabilizar las muertes por COVID en el Reino Unido.
En algunos casos, se clasificó como muerte por COVID a personas que ni siquiera la padecían.
Se utilizaron 14 términos diferentes para describir a los fallecidos por COVID.
El informe dirigido por el Dr. Carl Heneghan, epidemiólogo y director del Centro de Medicina Basada en la Evidencia de la Universidad de Oxford, ha revelado que el recuento de muertes en relación con el COVID con el que nos bombardean constantemente a diario no es exacto.
Los investigadores examinaron 800 respuestas a solicitudes de la Ley de Libertad de Información realizadas por miembros del público a instituciones médicas, como consorcios hospitalarios y residencias de ancianos.
Según el informe:
“La muerte es un resultado muy utilizado para evaluar la gravedad de las pandemias. La exactitud en la asignación de la causa de la muerte es de vital importancia para definir el impacto del agente, controlar su evolución y comparar su amenaza con la de otros agentes. A lo largo de la pandemia de COVID-19, se ha informado ampliamente de los datos agregados de las muertes, prestando poca atención a la exactitud de la asignación de la causa.”
Henneghan dijo a Eve Simmons, redactora adjunta de salud de The Mail:
“Es increíblemente importante comprender la cadena lógica de acontecimientos que condujeron a la muerte. Pero si cada organismo sanitario utiliza una definición diferente, ¿cómo podemos saber si el COVID ha causado directamente la muerte o si fue algo más lo que subyacía? Dos años después de esta pandemia, está claro que nadie puede entender o responder realmente a esa pregunta”.