Por Oriana Rivas – Panampost
Un nuevo comentario del actor Leonardo DiCaprio sobre la política brasileña provocó otro desencuentro con el presidente Jair Bolsonaro. Es un episodio que guarda antecedentes, ya que no es la primera vez que la estrella de Hollywood incita a los ciudadanos brasileños a tomar ciertas decisiones, que lejos del tema ambientalista, sugieren más un activismo político.
DiCaprio alentó al «voto joven» para «impulsar el cambio por un planeta saludable». Acto seguido, reseñó la dirección de un sitio web para obtener «más información sobre el registro de votantes en Brasil». De nuevo, apeló a la Amazonía «y otros ecosistemas críticos para el cambio climático».
El mandatario brasileño respondió. No solo usando la ironía, sino recordándole al actor que ha hecho uso de imágenes viejas para referirse a los incendios forestales. El detalle, tal como lo indicó Bolsonaro, es que la foto que DiCaprio usó en sus reclamos de 2019 realmente fue tomada en 2003, cuando el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva era el presidente.
«¡Gracias por tu apoyo, Leo! Es muy importante que todos los brasileños voten en las próximas elecciones. Nuestro pueblo decidirá si quiere mantener nuestra soberanía sobre la Amazonía o ser gobernado por ladrones que sirven a intereses especiales extranjeros», escribió el mandatario.
¿Conveniencia o verdadero ambientalismo?
Faltan pocos meses para las elecciones presidenciales en Brasil. Como principal contrincante de Bolsonaro está el socialista Lula da Silva, personaje que cuando ostentaba el cargo se vanaglorió de supuestos logros en materia ambiental y del Ministerio dirigido por Marina Silva. Su retórica llevó a que en 2007 la funcionaria fuera condecorada por la ONU como «campeona de la Tierra». Pero esa fue una fachada.
El Instituto Nacional de Investigación Espacial del Brasil (INPE) aseguró en 2019 que los incendios forestales en el gigante sudamericano estaban en su punto más bajo desde hacía 17 años. Revisando el gráfico quedó constancia de que la mayor cantidad de incendios en Brasil surgieron bajo la administración de Lula da Silva.
Entonces, los reclamos de DiCaprio quedan en entredicho, sobre todo considerando que su discusión y las de otras figuras públicas por la Amazonía estallaron a partir de los reproches que hizo el presidente francés, Emmanuel Macron, contra Bolsonaro ese mismo año.
¿El motivo? Macron culpaba a su homólogo brasileño por los intensos incendios que azotaron ese año a la región selvática. Pero debajo de ese argumento, posiblemente estuvo la presión de agricultores franceses que se oponían a un tratado de exportación entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur. Francia estaba en una posición difícil ante la futura llegada de productos brasileños. Es decir, el ambientalismo se perfiló más como una excusa para lograr intereses políticos y económicos, que en ejecutar verdaderos cambios en beneficio del ambiente.
Artistas en campaña electoral
El actor ganador de un Oscar hizo este nuevo reclamo y exhortó solapadamente a votar contra Bolsonaro. Pero si hablamos de daños al ambiente, nada dijo sobre la responsabilidad que debió haber asumido el entonces presidente boliviano Evo Morales en 2019 durante los intensos incendios que se registraron en su país. Adicionalmente, el mandatario socialista había autorizado un mes antes la quema agraria. Pero no hubo señalamientos en su contra. Leonardo DiCaprio solo hizo mención al asesinato de millones de animales en ese territorio, sin mencionar al presidente, encargado de velar por el bienestar del país.
Por estas razones se habla de objetivos más guiados por una agenda ideológica para apoyar a candidatos supuestamente más comprometidos con causas ambientales. Hay que tomar en cuenta que DiCaprio no es la única figura del espectáculo que levanta la bandera ambientalista para influir en la política. A pocos meses de las elecciones presidenciales, le acompañan otros artistas como la cantante Anitta. El objetivo es el mismo: sumar apoyos en contra de Bolsonaro.