Fuente: gaceta.es
El gobernador del estado de Oklahoma, Kevin Stitt, ha firmado este martes una ley para prohibir el aborto a partir de las seis semanas de gestación como parte de la oleada provida impulsada por el Partido Republicano en Estados Unidos.
La firma ha llegado pocas horas después de la filtración de un borrador que confirma la derogación por parte de la Corte Suprema de la sentencia «Roe versus Wade» que estableció el aborto como «derecho».
Su presidente, John Roberts, ha señalado que la «traición» de la filtración pretende «socavar la integridad» del trabajo del tribunal, al tiempo que ha avisado de que su labor «no se verá afectada de ninguna manera».
«Estoy orgulloso de firmar la ley SB1503, la Ley de Latidos del corazón de Oklahoma. Quiero que Oklahoma sea el estado más provida del país porque represento a los cuatro millones de habitantes que abrumadoramente quieren proteger a los no nacidos», ha declarado en su cuenta de Twitter.
La nueva ley, similar a la que se aprobó en Texas el año pasado, prohíbe el aborto una vez se detecte el latido del no nacido y solo lo autoriza si se realiza por una emergencia médica.
Los abortos han descendido en Oklahoma de manera constante en las últimas décadas. Así, se ha pasado de más de 6.200 en 2002 a 3.737 en 2020, según datos del Departamento de Salud del estado.