Rebaja al cuórum para reformas constitucionales ya es ley en Chile

Fuente: PanAm Post

El parlamento chileno aprobó este miércoles rebajar el cuórum necesario para llevar a cabo modificaciones a la Constitución, un debate que se abrió el pasado junio, cuando se terminó de redactar la propuesta de nueva carta magna que se someterá a plebiscito en septiembre con todas las encuestas dando como favorita la opción del «Rechazo».

Por 130 votos a favor, 15 en contra y 1 abstención, se despachó esta iniciativa, que busca que los cambios a la ley fundamental requieran del respaldo de cuatro séptimos de los parlamentarios, en lugar del actual cuórum de dos tercios.

«¡Es ley! Eliminado el primer candado (…), lo que nos permitirá tener una nueva pero buena Constitución para el país, que sea una casa de todos y no de unos pocos», celebró la democristiana (DC) Ximena Rincón en redes sociales.

Este proyecto para rebajar el cuórum fue presentado por un grupo de parlamentarios de la DC el pasado junio, a pocos meses del plebiscito de sufragio obligatorio en el que los chilenos deben decidir si se quiere aprobar la carta magna que Chile comenzó a redactar en 2021 o si prefieren mantener la actual.

Muchos interesados

Entre los impulsores de la moción destacan figuras de la derecha o del centro que no están satisfechas con el proyecto que se someterá a referéndum y creen que es más efectiva la vía de reformar la Constitución vigente, escrita durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y modificada parcialmente en democracia. Y también lo apoyaron quienes prefieren la nueva constitución pero creen que requiere de cambios, una postura cada vez más frecuente entre la izquierda moderada. También aparece esta vía como la puerta para efectuar mediante reformas los cambios que podrían ser rechazados en el plebiscito de septiembre si la opción del «Apruebo» sale derrotada.

Inicialmente algunos sondeos dieron ventaja a la opción de aprobar la nueva constitución, aunque cada vez más encuestas otorgan preferencia a la alternativa del «Rechazo» para mantener la actual carta magna.

El proceso constituyente se abrió como la vía política para amainar una masiva ola de protestas que comenzó en 2019 y dejó una treintena de fallecidos, miles de heridos y unas 70 estaciones del Metro de Santiago quemadas, así como negocios saqueados y hasta iglesias vandalizadas.