Fuente: Hispanidad
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha pedido en un escrito a la Corte Suprema que se inicie una investigación judicial sobre supuestos “delitos e irregularidades” relacionadas con las farmacéuticas que crearon las vacunas contra la Covid. DeSantis espera que el gran jurado depure “responsabilidades legales” de aquellos que puedan ser responsables de “mala conducta”.
Señala al Gobierno de Biden por imponer, junto a las farmacéuticas, la obligación de vacunarse: “El Gobierno Federal, las asociaciones médicas y otros expertos han creado la expectativa de que recibir una vacuna contra la COVID-19 es un deber ético o cívico y que elegir no vacunarse es egoísta y perjudicial para los demás” indica la petición de DeSantis.
A su parecer, Biden “trató de imponer una variedad de requisitos de vacunación al pueblo estadounidense, incluidos los trabajadores de la salud y los miembros del Ejército, que se basaron en la noción de que “las personas no vacunadas propagan el virus”. Incluso la Casa Blanca hizo unas declaraciones “amenazando a los no vacunados con un invierno de enfermedades graves y muerte”, agrega el escrito.
Además alega que hay algo más detrás puesto que ve “imposible imaginar que tantas personas influyentes hayan llegado a esta opinión por su cuenta”. Asegura que estas personas y empresas a favor de la vacuna “crearon estas percepciones para obtener ganancias financieras”.
DeSantis confirma que desconfía de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) del Gobierno Federal de Biden por lo que ha creado el Comité de Integridad de la Salud Pública de Florida: “Nuestro CDC, en este punto, cualquier cosa que publican, simplemente asumes, en este punto, que no vale el papel en el que está impreso. No está cumpliendo una función útil. Realmente está sirviendo para avanzar en las narrativas”.
Así, el médico Joseph Ladapo a cargo de Comité médico de Florida también llevará a cabo una investigación de las “muertes súbitas” en personas que recibieron la vacuna de la Covid.
Señala el documento que en abril de 2021, “se informó de más casos de miocarditis y pericarditis en personas en Estados Unidos después de recibir las vacunas contra la covid-19 de Pfizer y de Moderna” y “encontró un aumento en la incidencia relativa de muertes relacionadas con el corazón entre hombres de 18 a 39 años”.
“Reportes de otros países indican también que hay una conexión entre las vacunas contra la covid-19 y los sucesos cardoivasculares, incluso la muerte”.
La investigación pretende “identificar cualquier deficiencia en las leyes actuales, implementar métodos” e “investigar delitos” y acciones que involucren o resulten en “fraude o engaño a cualquier persona” relativos a las vacunas del coronavirus.
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