Este lunes, una mujer de 28 años, de nombre Audrey Hale, fuertemente armada, entró por la fuerza a una escuela cristiana en Nashville y disparó en los pasillos, asesinando a tres niños y tres maestras. Hale, que a pesar de haber nacido biológicamente como una mujer “se sentía un hombre”, estaba transicionando al género masculino.
La atacante había ido de joven a la Covenant School en Burton Hills Boulevard, y sentía un “profundo odio hacia la institución religiosa“, según reportó el jefe de policía metropolitano de Nashville, John Drake.
Además de los tres estudiantes de 9 años, asesinó a un conserje, a una maestra sustituto y a la directora de la escuela que justo estaban pasando por la entrada del pasillo del campus.
Afortunadamente, a diferencia de lo que ocurrió en Uvalde, Texas, algunos meses atrás, también con un asesino trans, los oficiales que llegaron a escena no se quedaron esperando, y corrieron hacia la ubicación del tirador, abatiéndolo inmediatamente y frenando la masacre.
Audrey Hale se había cambiado su nombre a “Aiden”, y pedía en sus redes sociales que se refieran a ella como “él”. Minutos antes de la masacre, le envió una serie de mensajes oscuros a una amiga de nombre Averianna Patton.
“Estoy planeando morir hoy”, decía el mensaje. “¡¡¡¡ESTO NO ES UNA BROMA!!!!“, exclamaba. “Probablemente escucharás sobre mí en las noticias después de que muera. Este es mi último adiós. Te amo. Nos vemos de nuevo en otra vida”, escribió, ante lo que muchos especulan era un amorío no correspondido que tenía Audrey con esta mujer.
Hale firmó el mensaje a Patton como “Audrey (Aiden)” y tenía una marca de tiempo a las 9:57 am, tan solo 16 minutos antes de que se hiciera la primera llamada al 911 desde la escuela, a las 10:13 am. A las 10:27 am, la tiradora había sido abatida.
Patton respondió rápido al alarmante mensaje diciéndole que tenía “mucha más vida por vivir”. “Lo sé, pero no quiero vivir“, respondió Hale, que ya debía haber estado entrando a la escuela para ese momento. “Lo siento mucho. No estoy tratando de molestarte o llamar la atención. Solo necesito morir“.
La policía allanó su vivienda este martes, y encontró una preparación terrorífica del ataque. “Había mapas dibujados de la escuela, con detalles de vigilancia, puntos de entrada”, dijo el cuerpo policial en un comunicado.
El tirador, que murió en el segundo piso de la escuela, tenía dos “rifles de asalto y una pistola”, que había podido comprar legalmente. En Tennessee no hay ninguna restricción para la compra de armas de fuego, aunque sí se debe hacer una verificación de antecedentes, pero “Audrey Hale no tenía ningún antecedente de ningún tipo“, aseguró la Policía.
El gobierno de Biden está buscando implementar una ley federal que prohíba la compra de armas a las personas que tengan problemas mentales, pero no ha definido cómo determinará quién tiene enfermedades que ameriten una intervención estatal. Por ejemplo en este caso, ¿la enfermedad mental sería que estaba transicionando de género?