Por Jewlan para RFA Uyghur traducido por TierraPura.org
Grupos de derechos humanos criticaron a las Naciones Unidas (ONU) por no tomar medidas concretas contra el gobierno de China por su represión (entre otras acciones compatibles con terrorismo de Estado) a los uigures en Xinjiang, diciendo que el organismo internacional ha hecho poco desde que publicó hace un año un informe condenatorio afirmando que el regimen chino puede haber cometido crímenes contra la humanidad en población mayoritariamente musulmana.
El informe publicado el 31 de agosto de 2022 por la ex Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, destacó “graves violaciones de derechos humanos” en la Región Autónoma Uigur de Xinjiang en medio de lo que Beijing ha descrito como medidas para contrarrestar el terrorismo y el extremismo religioso.
El informe realizaba 13 recomendaciones al gobierno del régimen comunista chino, incluida la liberación inmediata de aquellos detenidos arbitrariamente en campos, prisiones u otras instalaciones.
Pero el actual zar de derechos humanos de la ONU, Volker Türk, “en realidad no ha seguido estas recomendaciones como ha prometido repetidamente”, dijo Maya Wang, directora asociada de la división de Asia de Human Rights Watch, o HRW.
Türk ha dicho que se comunicará personalmente con las autoridades chinas y ha reconocido la necesidad de un seguimiento concreto de las conclusiones del informe, pero aún no ha informado al Consejo de Derechos Humanos de la ONU sobre el informe ni sobre el seguimiento de la situación en Xinjiang por parte de su oficina. dijo HRW en un comunicado el jueves.
La influencia (del régimen comunista) de China en las Naciones Unidas dificulta la adopción de medidas, reconoció Wang.
“No se debe a una falta de interés o compromiso, sino más bien a que, siendo realistas, el gobierno chino es un actor muy importante en la ONU y en los últimos años se ha vuelto cada vez más poderoso”, afirmó. “Simplemente existen dificultades realistas para hacer que un gobierno muy poderoso rinda cuentas”.
Wang dijo que muchos otros gobiernos no han dado prioridad a responsabilizar al gobierno chino por sus crímenes debido a sus fuertes vínculos comerciales y comerciales con el país.
El gobierno de Estados Unidos y las legislaturas de varias naciones occidentales han declarado que los abusos equivalen a genocidio o crímenes contra la humanidad, mientras que la mayoría de las naciones predominantemente musulmanas han guardado silencio.
Necesidad de investigaciones
El informe de la ONU del año pasado dijo que Beijing debería publicar detalles sobre la ubicación de los uigures en Xinjiang que habían estado incomunicados con familiares en el extranjero, establecer un medio de comunicación seguro para ellos y permitir viajes para que las familias puedan reunirse.
También aconsejó al gobierno del régimen comunista chino que investigara las denuncias de abusos contra los derechos humanos en los campos, incluidas denuncias de tortura, violencia sexual, trabajos forzados y muertes bajo custodia.
La respuesta de la comunidad internacional a los “crímenes” de China ha sido “lamentablemente inadecuada”, afirmó Amnistía Internacional, con sede en Londres.
El primer aniversario del informe de la ONU debería ser un llamado a la acción para la comunidad internacional, dijo Sarah Brooks, subdirectora regional de Amnistía para China.
“La necesidad de que los estados, a través del Consejo de Derechos Humanos, establezcan un mecanismo internacional independiente para investigar crímenes bajo el derecho internacional y otras violaciones graves de derechos humanos en Xinjiang es más urgente que nunca”, dijo en un comunicado emitido el jueves.
“Las familias de quienes han sido detenidos arbitrariamente, desaparecidos forzadamente o maltratados quieren y merecen respuestas y rendición de cuentas, no demoras ni compromisos”, afirmó.
Amnistía y otras organizaciones de derechos humanos han publicado informes creíbles que documentan violaciones de derechos y malos tratos a musulmanes en Xinjiang, incluida violencia sexual y de género.
‘Nada ha cambiado’
La oficina de derechos humanos de la ONU dijo a la Agence France-Presse el jueves que todavía estaba presionando para que se rindan cuentas por los abusos en Xinjiang, después de que grupos de derechos humanos la acusaran de inacción.
Los grupos de derechos humanos uigures, que han estado presionando para que se tomen medidas globales concretas contra China, repitieron sus llamados.
“Un año después de este informe innovador, parece que casi nada ha cambiado”, dijo en un comunicado Omer Kanat, director ejecutivo del Proyecto de Derechos Humanos Uigur (UHRP) . “Los uigures necesitan que la oficina de derechos humanos de la ONU sea líder en la respuesta global a las atrocidades de China”.
La próxima 54ª sesión del Consejo de Derechos Humanos presenta otra oportunidad para abordar la crisis de derechos humanos, o de lo contrario la oficina de derechos humanos de la ONU corre el riesgo de sentar un precedente de que Estados poderosos pueden actuar con impunidad mientras cometen graves crímenes internacionales, dijo la UHRP.
La Campaña para los Uigures, con sede en Washington, DC, instó al Consejo de Derechos Humanos de la ONU a establecer un mecanismo independiente y transparente para investigar los crímenes y garantizar que los responsables rindan cuentas ante los tribunales internacionales.
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