Traducido de TheGatewayPundit.com por TierraPura.info
Este artículo fue publicado originalmente en WND.com
Por Bob Unruh
A los agricultores que no sean lo suficientemente ‘woke’ se les pueden cerrar las cuentas sin previo aviso.
Los agricultores están bajo ataque en múltiples naciones productoras de alimentos ahora.
WND informó hace apenas unos días sobre un video que mostraba tiendas vacías en Francia, donde una agenda climática amenazó los procesos de producción de los agricultores, y más o menos organizaron una huelga.
Y hace poco, en Alemania, los agricultores bloquearon carreteras en protesta por las costosas e innecesarias políticas agrícolas.
Ahora, sin embargo, hay una nueva campaña contra los agricultores, en la que las Naciones Unidas trabajan con los bancos para debanquear a los productores de alimentos, cerrando sus cuentas y no permitiéndoles operar sus negocios.
El reportaje es de NewsAddicts, que explica que funcionarios de 12 estados de EE.UU. dieron la voz de alarma tras descubrir que “las Naciones Unidas globalistas no electas están trabajando en secreto con los bancos para destruir la industria agrícola estadounidense”.
El informe explicaba que los bancos utilizan los “criterios medioambientales, sociales y de gobierno corporativo” (ESG) marxistas de la ONU para marcar y penalizar a los agricultores”.
Según el informe, los agricultores que no sean lo suficientemente “woke”, es decir, que utilicen métodos y procesos que no estén aprobados por ESG, ven cerradas sus cuentas sin previo aviso.
El informe acusaba: “El complot pretende estrangular a la industria agrícola para eliminar a todos aquellos que no cumplan con la agenda globalista ‘Net Zero’ del Foro Económico Mundial (FEM)”.
La verdadera estructura de ataque funciona a través de la “Alianza Bancaria Net Zero” (NZBA) de la ONU, explicaba el reportaje.
Pero eso ha impulsado a los comisarios de agricultura de una docena de estados a acusar a varias de las mayores corporaciones bancarias de Estados Unidos de trabajar para aumentar los precios de los alimentos, e incluso reducir su disponibilidad.
El informe afirma: “Critican la pertenencia de los bancos a la NZBA, cuyo objetivo es financiar acciones climáticas ambiciosas, perjudicando potencialmente las operaciones agrícolas y ganaderas estadounidenses al promover una agenda que prioriza las turbinas eólicas y los paneles solares sobre fuentes de energía como el combustible diésel”.
La ideología ESG del banco supone en realidad una amenaza para la seguridad alimentaria mundial, señaló el reporte.