Traducido de Slay News por TierraPura.info
Por Frank Bergman
En un importante esfuerzo por tomar el control de la libertad financiera del público, Canadá está radicalizando su sistema bancario vinculando las cuentas bancarias de los ciudadanos a una puntuación de crédito social tiránica.
El sistema bancario canadiense pronto se verá transformado por el llamado marco de “banca abierta”.
Sus defensores enmarcan esto como una forma más “inclusiva” para que los bancos compartan información y accedan fácilmente a los datos de los usuarios.
Sin embargo, la medida fusionará las posiciones sociales con la banca para brindar a los gobiernos y a los burócratas no electos un control total sobre nuestras finanzas.
La organización Open Banking Excellence (OBE), un socio del Banco Mundial que se originó en el Reino Unido, se jacta de que incorporará puntajes de crédito sociales e información bancaria, y probablemente efectivo e identificaciones digitales, en un lugar “conveniente” e “inclusivo”.
OBE, que ha llegado a 40 países, tiene como objetivo “crear plataformas y contenidos excepcionales que promuevan el intercambio de conocimientos, nuevas ideas y asociaciones dentro de la industria, catalizando la adopción de finanzas y datos abiertos para una mejor inclusión financiera en todo el mundo”.
“Se trata de tener una sociedad más justa, más inclusiva y más abierta”, dijo Helen Child, fundadora de Open Banking Excellence.
Por supuesto, la “sociedad abierta” es una ideología defendida por el multimillonario radical George Soros que implica fronteras abiertas, ausencia de prisiones y un crimen rampante, entre otras ideas “progresistas”.
Sin embargo, no se explica la necesidad de inclusión y equidad en la banca, a pesar de que los defensores del plan la insisten repetidamente.
“Impulsa la inclusión financiera”, afirma Child sobre el plan.
“Está democratizando los datos”.
Lo que Child no mencionó es que los datos valdrán más que el oro a medida que avancemos hacia una sociedad sin efectivo .
No hay manera más fácil de controlar a las masas que controlar su acceso al dinero y su capacidad para comprar, comerciar y moverse libremente.
La prensa canadiense describió el verdadero motivo a la vista:
“Una de las áreas de mayor crecimiento es la evaluación crediticia.
“Bajo la banca abierta, los prestamistas podrían acceder directamente a los datos bancarios de un individuo, para poder mirar más allá de las calificaciones crediticias.
“Los consumidores también pueden usarlo para mejorar su puntaje crediticio, por ejemplo, demostrando pagos de alquiler confiables”.
Mirar más allá de los puntajes crediticios equivale a determinar si una persona es apta para participar en la economía global en función de sus puntos de vista personales.
Mientras Canadá continúa tomando medidas enérgicas contra el llamado “odio”, el siguiente paso será inevitablemente impedir que los ciudadanos accedan a su dinero si se sospecha que piensan mal.
El gobierno canadiense ya puso a prueba estos planes cerrando las cuentas bancarias de los manifestantes del Freedom Convoy en 2022.
El político populista británico Nigel Farage también ha sido víctima de la agenda de desbancarización.
Farage nunca cometió un delito ni hizo nada que justificara lo que muchos han llamado el “fiasco de Farage”.
De repente, Coutts lo desbancarizó y no pudo acceder a ninguna de sus cuentas corrientes o de ahorro.
Sus tarjetas de crédito fueron desactivadas.
No podía participar en la sociedad sin previo aviso.
Farage hizo su debida diligencia y descubrió que innumerables personas habían experimentado el mismo ataque financiero llevado a cabo por los bancos en nombre del gobierno.
Este es un fenómeno generalizado.
Vimos que esto sucedió comúnmente durante los bloqueos de Covid, donde a los usuarios no se les permitía acceder a lugares si sus pasaportes digitales de Covid fallaban.
En China, cuando los bancos enfrentaban una crisis de liquidez, el Partido Comunista Chino (PCC) simplemente negó a los depositantes el derecho a acceder a su dinero.
A los ciudadanos se les impidió el acceso físico a sus bancos.
El gobierno evitó con éxito una corrida bancaria mediante su intervención.
Vimos a algunas celebridades expulsadas del sistema por expresar opiniones impopulares sin ningún procedimiento legal ni delitos cometidos.
Sin embargo, Canadá es una de las muchas naciones que esperan utilizar puntajes de crédito social no oficiales para controlar a las masas.
Todas estas acciones están preparando el escenario para el funcionamiento de la moneda digital del banco central (CBDC).
Una vez que las CBDC se implementen para uso público, el sistema será una red colectiva que contendrá los datos personales, la identificación digital , la puntuación de crédito social, el estado de vacunación y el dinero de todos .
Los gobiernos ya han comenzado a desbancarizar a las personas.
Estos últimos pasos harán que sea cada vez más fácil obligar a las masas a doblegarse y ceder todo el control a la élite globalista.
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