Fuente: Derecha Diario
En el año 2012 se aprobo la ley de aborto legal en Uruguay, lo que ha llevado, en tiempo récord, a un declive poblacional en el país oriental, que atraviesa desde 2016 la mayor caída de nacimientos de su historia.
Esta merma empieza a hacerse notar en los grados escolares, con la mayoría de los nacidos aquel 2016, ahora entrando a segundo grado de escuela, y revelando un preocupante colapso de la natalidad.
En total, unos 300.000 niños comenzaron las clases este mes en Uruguay, distribuidos en 2.300 escuelas de todo el país. Sin embargo, yendo a la comparativa, en las escuelas públicas las clases empiezan con 6.502 alumnos menos que el año anterior, unos 20.000 menos que hace un lustro y casi una generación entera menos que hace 15 años.
El caso más evidente —y curioso— es la generación de primer grado de escuela que inicia las clases este lunes: es 17% más chica que la generación de primero del año pasado, y se convierte en la generación más pequeña de ese grado desde que hay registros.
La última proyección que realizó la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) del Ministerio de Educación, estima que, antes de que acabe la década en curso, la población en edad escolar se reducirá una la cuarta parte respecto a la observada a comienzos de la misma década.
Si bien es el factor principal, el aborto no es la única razón por la caída de natalidad. Hoy, Uruguay es uno de los países mas caros de América Latina y del mundo para tener hijos, culpa de las trabas gigantes a la importación que impone el Estado uruguayo y de los impuestos excesivos que tienen que pagar los comercios y la clase media, llevando a precios locales más altos que los internacionales, pero con sueldos peores. Todo esto afecta gravemente la situación demográfica.
Este impacto también afecta a la oferta. Al haber menos niños en Uruguay y menos ingresos a las escuelas, cada vez las maestras y profesores son menos requeridos. El problema de natalidad ahora se está convirtiendo en una crisis de desempleo para los trabajadores de la educación.
En rueda de prensa la semana pasada, la Directora de Primaria del Ministerio de Educación, Olga de las Heras, dijo que “hay maestros recién recibidos que todavía no han podido elegir cargo” y que en el caso de la carrera de Maestro de Primera Infancia (MPI) hay “mucha demanda, pero no hay tanta oferta para ubicarlos” y por eso hay docentes que aún no pueden trabajar.