Por Sonia Montañez para VCSMEDIA.NET
Como padres, queremos lo mejor para nuestros hijos. Deseamos verlos crecer seguros y con la capacidad de enfrentar los desafíos de la vida. Y si bien no existe una fórmula mágica que garantice este resultado, hay algo que sí podemos hacer: utilizar el poder de las palabras.
Las palabras que usamos con los niños tienen un impacto profundo en su desarrollo emocional, social y cognitivo.
Las palabras mágicas no son hechizos o conjuros, sino expresiones que, cuando se usan con intención y cariño, pueden generar cambios positivos en la vida de los pequeños.
Comunicación positiva con tus hijos
Es importante cultivar un estilo de comunicación positiva y asertiva. Esto significa:
Hablar con respeto: Evitar gritos, insultos o lenguaje sarcástico.
Ser claro y directo: Expresar las ideas de forma sencilla y comprensible para los niños.
Escuchar con atención: Prestar atención a lo que los niños dicen y sienten sin interrumpir.
Validar sus emociones: Reconocer y aceptar sus sentimientos, incluso si no estamos de acuerdo con ellos.
Elogiar y celebrar sus logros: Fomentar su autoestima y motivación.
Establecer límites claros: Definir las reglas del hogar de manera consistente y justa.
Utilizar el humor: Incorporar risas y juegos a la comunicación diaria.
¿Qué palabras pueden herir a los niños en su desarrollo?
Existen frases que, sin darnos cuenta, pueden tener un impacto negativo en la autoestima y el desarrollo emocional de los niños. Algunas de ellas son:
Insultos o descalificaciones: Llamarlos “tontos”, “perezosos”, “inútiles”, Eres un vago” o “Eres un niño malo” puede dañar su imagen propia.
Amenazas o chantajes: Decirles “Si no haces esto, te castigaré” o “Te vas a arrepentir” genera miedo y ansiedad.
Comparaciones con otros niños: Decirles “Tu hermano era mejor que tú”, “¿Por qué no puedes ser como…?, o “Aprende de tu hermano” puede generar sentimientos de inferioridad.
Minimizar sus sentimientos: Decirles, “Me fastidias”, “No llores que no es para tanto”, o “No seas dramático”, cuando están tristes o enfadados les invalida.
Exigencias excesivas: Presionarlos para que rindan más allá de sus capacidades puede generar estrés y ansiedad.
Otras palabras negativas son:
- Me vas a volver loca”
- “Estoy harta de ti”
- “Porque lo digo yo… y punto”
- “No me importa”
¿Por qué es importante hablar asertivamente con los niños?
La comunicación asertiva es una herramienta fundamental para construir relaciones sanas y positivas con los niños.
El portal guía infantil menciona que el lenguaje es muy importante en la educación de los niños, se debe tener cuidado con lo que se les dice ya que, finalmente, los niños se convierten de cierta manera en el reflejo de los padres.
Si un padre acostumbra a gritar a su hijo, el niño también lo hará. Si se le dice que es “tonto”, seguramente ese niño también en algún momento les responda con esta palabra a sus padres, y así mismo lo hará con otros niños.
No se trata de decirles siempre sólo cosas buenas a los niños, si empleas una crianza donde sólo le menciones cosas bonitas, estarás haciéndole un daño a tu hijo, ya que en algún momento se enfrentará a escuchar a que le digan cosas que no sean buenas, o no será capaz de enfrentar una crítica o una observación.
Por ello, hablar asertivamente con ellos es usar palabras claras y coherentes, adaptando un tono firme y cálido, seguro y sin dejarse llevar por la rabia o las emociones del momento, ya que es más fácil herirlos o decir cosas que no se deberían decir. Es entender que la carga emocional que se imprime en ellos puede afectar negativamente su autoestima y autoconcepto.
Si hablamos con asertividad a los niños, les estamos enseñando a:
- Expresar sus ideas y sentimientos de manera clara y respetuosa.
- Defender sus derechos de forma adecuada.
- Escuchar a los demás y comprender sus puntos de vista.
- Negociar y resolver conflictos de manera pacífica.
- Desarrollar una autoestima sana y segura.
Ejemplos de palabras mágicas que puedes usar con los niños
“Te amo”
Expresar amor y afecto incondicional es fundamental para el desarrollo emocional de los niños.
“Estoy orgulloso de ti”
Reconocer sus logros y esfuerzos les motiva a seguir adelante.
“Confío en ti”
Demostrarles confianza les ayuda a desarrollar su independencia y autoestima.
“Gracias”
Agradecer su ayuda y fortalecer los lazos familiares.
“Perdóname”
Asumir la responsabilidad de nuestros errores y pedir perdón les enseña la importancia de la honestidad y la reparación.
“Te entiendo”
Es enseñarles a través de la empatía que los comprendes y validas lo que están sintiendo, de esta manera también los ayudas a saber guiar y gestionar sus emociones.
“Date la oportunidad”
Les enseñas a través de estas palabras que frente a una situación que le incomode, sea un reto, le desagrade o sienta que no es capaz, debe darse la oportunidad de aprender, intentar, levantarse y seguir adelante.
“Admiro tu esfuerzo”
Palabras que fortalecen su autoestima, además que les enseña que, a través de esfuerzos pueden alcanzar una meta y sentirse orgullosos por ello.
“Eres valiente”
Decirle a un niño “Eres valiente”, refuerza que actúe con decisión y firmeza frente a alguna situación que le genere ese sentimiento de miedo, inquietud o duda.
“Aprende de los errores”
Es importante que como adultos les enseñemos que en algún momento podemos cometer errores, reconocer cuando los cometemos y aprender de ellos para poder hacer las cosas de una manera diferente en la siguiente oportunidad.
“Cuentas conmigo”
El portal guía infantil recomienda decir estas palabras a los niños cada que duden de sí mismos, también cuando tengan la iniciativa de hacer algo y necesiten ese empujón que los motive hacerlo.
“Eres importante para mí”
Los niños necesitan saber que sus padres o cuidadores a través de estas palabras, les den esa seguridad de sentirse protegidos y amados, esto les aportará una paz y tranquilidad.
“Te escucho”
Como padres, es importante decirles que los escuchas para que sientan que sus necesidades expresivas son valoradas. Además, también les ayuda a entender que las opiniones de los demás deben ser valoradas y tomadas.
“Puedes decir “NO”, o puedes decir “SI”
Frente algunas situaciones o circunstancias los niños pueden sentirse presionados y no saben cómo actuar, hasta tal punto que terminan haciendo algo con lo que no están cómodos o no desean hacer. Por ello, es fundamental enseñarles lo que está bien y lo que no, para que sepan distinguir y tomar decisiones con racionalidad, siendo coherentes dependiendo la situación sin pasar por alto sus principios y valores.
Por último, no olvides que las palabras que usamos con los niños tienen un poder inmenso. Elige cuidadosamente las tuyas y úsalas para construir relaciones fuertes, amorosas y llenas de respeto.