Ryan Wesley Routh, de 58 años, ha sido identificado como el sospechoso del intento de asesinato contra el expresidente Donald Trump en su club de golf en West Palm Beach, Florida, el domingo.
Routh, quien tiene un largo historial de enfrentamientos con la justicia, fue detenido después de que agentes del Servicio Secreto dispararan al ver un cañón de rifle AK-47 sobresaliendo de un seto cerca de la residencia de Trump.
El sospechoso huyó en un vehículo, pero fue interceptado gracias a la información proporcionada por un testigo que fotografió su coche.
Historial criminal
El pasado de Routh está marcado por varios incidentes con la ley. En 2002, fue arrestado y condenado por posesión de una ametralladora tras un enfrentamiento con la policía en Carolina del Norte, donde se atrincheró en un negocio. Este no fue su único delito. También ha enfrentado cargos por posesión de material robado y huida tras un accidente de tráfico.
A lo largo de los años, su comportamiento ha revelado una creciente inestabilidad, con registros de disputas legales relacionadas con su empresa de construcción.
Motivaciones y actividad en redes sociales
Aunque Routh había apoyado a Trump en las elecciones de 2016, su relación con el expresidente cambió drásticamente.
En los últimos años, sus mensajes en redes sociales mostraban un desencanto profundo con el exmandatario, aunque seguía expresando simpatía por figuras políticas de ambos partidos.
Routh participó en las primarias demócratas de 2023 y donó dinero a candidatos tanto republicanos como demócratas.
Además, se ha mostrado en ocasiones favorable hacia el presidente Joe Biden y la vicepresidente Kamala Harris, esta última rival de Trump en los comicios del próximo 5 de noviembre.
Sus publicaciones en la red social X (anteriormente Twitter) revelan su postura vehementemente opuesta a la invasión rusa de Ucrania.
De hecho, Routh llegó a viajar a Ucrania en 2022 para intentar reclutar soldados afganos que lucharan en favor de Kiev, pese a no contar con experiencia militar.
En sus mensajes, hacía llamados a la acción, instando a voluntarios de todo el mundo a unirse a la causa ucraniana.
“Puede que tardemos 10 años, pero vamos a perder esta batalla si todo el mundo no deja lo que está haciendo, se levanta del sofá y viene a Ucrania a defender los derechos humanos de todo el mundo”, decía Routh durante una entrevista en Ucrania hace dos años para Newsweek Rumania.
Un perfil contradictorio
El perfil de Routh es confuso y contradictorio. En entrevistas pasadas, como una con The New York Times, se describió como un defensor de los derechos humanos, dispuesto a sacrificarlo todo por causas en las que creía, como la defensa de Ucrania.
Por otro lado, sus acciones recientes parecen haber tomado un giro oscuro y violento, lo que ha resultado en su arresto por un presunto intento de asesinato.
Su hijo, Oran Routh, se ha mostrado sorprendido por los hechos y ha declarado que su padre siempre ha sido un hombre trabajador y cariñoso. “El hombre que yo conozco no cometería ninguna locura, mucho menos violenta”, señaló en una entrevista a la CNN.
La detención de Routh deja más preguntas que respuestas sobre las motivaciones exactas detrás de este intento de asesinato, mientras que las autoridades continúan investigando el caso para esclarecer los detalles.