Por Sabrina Martín – voz.us
El Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó una denuncia contra tres ciudadanos iraníes, empleados del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), acusándolos de participar en un complot de piratería informática dirigido a la campaña presidencial del expresidente Donald Trump.
Según el comunicado publicado este viernes, los sospechosos, Masoud Jalili, Seyyed Ali Aghamiri y Yasar Balaghi, crearon un extenso esquema de ciberataques contra figuras políticas estadounidenses “para avivar la discordia, erosionar la confianza en el proceso electoral de Estados Unidos y adquirir ilegalmente información relacionada con funcionarios estadounidenses actuales y anteriores que pudiera usarse para promover las actividades malignas del CGRI”.
Acusaciones y cargos
De acuerdo con la acusación federal, los tres iraníes enfrentan una serie de cargos graves, incluidos conspiración para acceder ilegalmente a sistemas informáticos, robo de identidad agravado, fraude electrónico y manipulación de autenticación. Se les acusa de orquestar una campaña de piratería utilizando técnicas de spearphishing e ingeniería social para comprometer las cuentas de funcionarios gubernamentales, miembros de los medios de comunicación y personas vinculadas a campañas políticas, incluidos altos cargos de la campaña de Trump.
Según las autoridades, en junio de este año, los piratas informáticos robaron la información e intentaron convertir “en arma el material” al compartirla con contactos cercanos a la entonces campaña presidencial de Joe Biden y con medios de comunicación.
El contexto geopolítico: un largo historial de tensiones
Este no es el primer intento de ciberataque iraní contra el expresidente Trump. El gobierno estadounidense ha reiterado que Irán ha sido un actor hostil desde el asesinato de Qasem Soleimani, excomandante de la Fuerza Qods, ordenado por Trump en 2020. Desde entonces, los intereses políticos y personales del expresidente han sido objeto de amenazas y ataques directos, incluidos los esfuerzos por desestabilizar el proceso electoral estadounidense.
La campaña de Trump confirmó recientemente que el expresidente fue informado sobre “amenazas reales y específicas” por parte de Irán, que incluyen planes para atentar contra su vida. El director de comunicaciones de la campaña de Trump, Steven Cheung, calificó estas amenazas como parte de una estrategia más amplia de la República Islámica para “sembrar el caos y desestabilizar a Estados Unidos”.
Respuesta de las autoridades
En respuesta a estas amenazas, las agencias de inteligencia y las fuerzas de seguridad estadounidenses dicen haber intensificado sus esfuerzos para proteger al expresidente y garantizar que las próximas elecciones se desarrollen sin interferencias extranjeras.
“El Departamento de Justicia está trabajando incansablemente para descubrir y contrarrestar los ciberataques de Irán destinados a avivar la discordia, socavar la confianza en nuestras instituciones democráticas e influir en nuestras elecciones. El pueblo estadounidense –no Irán ni ninguna otra potencia extranjera– decidirá el resultado de las elecciones de nuestro país”, afirmó el Fiscal General Merrick B. Garland.
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