Por Frances Bloomfield – Petfoodscience.com
Los peligros que plantean estos aditivos sintéticos llamados parabenos ya están bien documentados. Se han relacionado con un mayor riesgo de cáncer de mama y pubertad precoz, así como con una reducción de los niveles de esperma. Por ello, los fabricantes de cosméticos y productos de cuidado personal han intentado eliminar gradualmente los parabenos de sus productos. Sin embargo, no se puede decir lo mismo de otros productos, y es por eso que los gatos y los perros corren un alto riesgo de exposición a los parabenos .
Este sorprendente descubrimiento se produjo en 2018 después de que los investigadores estudiaran 58 variedades diferentes de comida comercial para perros (23 variedades) y comida para gatos (35 variedades). Además, también recogieron 60 muestras de orina de 30 perros y 30 gatos en Albany, Nueva York. Los análisis revelaron que todas las muestras de comida para mascotas y de orina contenían trazas de parabenos y sus metabolitos. En particular, los investigadores observaron que los químicos más abundantes eran el metilparabeno , un agente antibacteriano y fungicida, y el ácido 4-hidroxibenzoico, un metabolito y ácido aromático.
El contenido de parabenos y metabolitos en los alimentos secos fue mayor que en los húmedos. Además, las concentraciones de estos químicos eran mucho mayores en los alimentos para gatos. Las concentraciones medias totales de parabenos en los alimentos para gatos eran de 1550 nanogramos por gramo (ng/g) de peso fresco; las concentraciones medias totales de parabenos en los alimentos para perros eran de alrededor de 1350 ng/g de peso fresco.
Curiosamente, las concentraciones medias totales de parabenos en las muestras de orina demostraron que los perros estaban más expuestos a ellos. Las concentraciones medias en la orina de los perros rondaban los 7230 nanogramos por mililitro (ng/ml); en la orina de los gatos, rondaban los 1040 ng/ml.
Con base en los resultados, los investigadores concluyeron que los perros estaban entrando en contacto con otras fuentes de parabenos además de su comida . Por otro lado, la dieta fue la principal vía de exposición a los parabenos para los gatos. Los investigadores agregaron que en 2018 fue la primera vez que se informó sobre la presencia de parabenos en alimentos y orina para perros y gatos en los Estados Unidos.
Actualmente, no se conoce la existencia de estudios que hayan analizado los efectos negativos de la exposición a parabenos en las mascotas. Sin embargo, como señalaron los investigadores en su estudio, creen que estos químicos y otros pueden estar contribuyendo a la creciente incidencia de enfermedades entre las mascotas que permanecen en el interior de los hogares.
Evite molestias y prepare su propia comida para mascotas: qué ingredientes incluir
Una forma de limitar los parabenos en la dieta de tu mascota es preparar tu propia comida. Pero como los gatos y los perros son diferentes entre sí y de los humanos, lo que es bueno para una especie puede no serlo necesariamente para la otra. Si quieres dar un paso más y preparar una comida casera para tu mascota, toma nota de lo que puedes y no puedes darle:
- Carne cocida: imprescindible para los gatos, ya que son carnívoros obligados , lo que significa que obtienen su nutrición principalmente de la carne. La carne de res , cerdo y pollo son seguras para perros y gatos, siempre que no hayan sido condimentadas con salsas o condimentos. La sal es especialmente mala para los perros, ya que puede provocar intoxicación por sal o privación de agua. Tenga cuidado también con los huesos pequeños, ya que pueden provocar asfixia.
- Huevos cocidos: Tanto los gatos como los perros pueden comer huevos cocidos sin problemas. Alimentarlos con huevos de tamaño mediano les proporcionará una buena cantidad de minerales, vitaminas y proteínas. Los huevos crudos deben evitarse por completo, ya que pueden transmitir salmonela y hacer que su mascota enferme.
- Salmón cocido: los ácidos grasos omega-3 del salmón favorecen la salud de los ojos, el cerebro y la piel de perros y gatos por igual. Al igual que con todos los demás alimentos mencionados hasta ahora, el salmón siempre debe cocinarse antes de servírselo a su mascota, ya que esto minimiza el riesgo de enfermedad.
- Avena simple: sin ningún sabor adicional, la avena rica en fibra puede ser un buen complemento para la dieta de tu mascota. Puede que no a todos los gatos les guste la avena, pero tampoco les hará ningún daño. Solo asegúrate de que a tu gato le guste antes de mezclarla con su comida.
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