Anuncio

Por Rafa Gómez-Santos MartínGateway Hispanic

En un explosivo testimonio ante el Senado, el senador republicano Josh Hawley reveló hoy que Meta, la empresa matriz de Facebook, permitió al gobierno chino acceder y almacenar datos personales de ciudadanos estadounidenses, desatando una tormenta de críticas sobre la seguridad nacional y la traición a los valores americanos.

El senador Josh Hawley (R-MO), conocido por su firme postura contra las grandes tecnológicas y su defensa de los intereses estadounidenses, expuso durante una audiencia del Subcomité Judicial sobre Crimen y Contraterrorismo que Meta colaboró con el Partido Comunista Chino (PCCh) para almacenar datos de usuarios en servidores ubicados en China.

Esta decisión, según afirmó, no solo comprometió la privacidad de millones de americanos, sino que también otorgó al régimen chino acceso directo a información sensible, incluyendo datos de quienes intercambiaban mensajes con usuarios chinos en la plataforma.

https://twitter.com/MAGAVoice/status/1910154298606162096

La acusación proviene de Sarah Wynn-Williams, exdirectora de políticas públicas globales de Facebook, quien testificó bajo juramento como denunciante. Hawley señaló directamente a Mark Zuckerberg, CEO de Meta, acusándolo de priorizar las ganancias económicas sobre la seguridad nacional.

El gobierno chino, por su parte, emerge como el beneficiario de esta supuesta alianza, mientras que los ciudadanos estadounidenses son las víctimas de esta filtración masiva de datos.

Las revelaciones se hicieron públicas el 10 de abril de 2025, aunque Wynn-Williams afirmó que las negociaciones entre Meta y el PCCh datan de al menos 2014, como parte de un plan de tres años para ingresar al mercado chino, conocido como «Proyecto Aldrin».

Este proyecto, según documentos internos citados por el senador, incluía la construcción de herramientas de censura y la cesión de datos al régimen comunista. Los datos habrían sido almacenados en centros tecnológicos en China, conectados a través de una infraestructura como el fallido cable submarino Pacific Light, que buscaba unir California y Hong Kong.

«Meta estaba dispuesta a almacenar datos en China y a dar acceso al gobierno chino. ¡Al diablo con los datos de los usuarios y la información personal de los estadounidenses! Meta siempre ha buscado el beneficio y el poder». Senador Josh Hawley.

Esta filtración representa una amenaza directa a la soberanía y seguridad de Estados Unidos, según Hawley, quien calificó el acto como «traición». En un contexto de crecientes tensiones con China, el acceso del PCCh a datos americanos podría ser utilizado para espionaje, represión de disidentes o incluso chantaje. Además, contradice las declaraciones previas de Zuckerberg, quien había negado cualquier colaboración con Pekín, lo que podría derivar en cargos por perjurio.

El testimonio de Wynn-Williams, respaldado por documentos internos de Meta revisados por el subcomité, puso al descubierto una estrategia de la empresa para ganar un mercado de 18 mil millones de dólares en China, a costa de los principios americanos. Hawley destacó un clip de 57 segundos de la audiencia como prueba clave, instando a los ciudadanos a verlo para comprender la magnitud del problema.

Desde hace años, Hawley ha liderado una cruzada conservadora contra las grandes tecnológicas, alertando sobre su poder desmedido y sus vínculos con regímenes autoritarios. En 2019, presentó la Ley de Seguridad Nacional y Protección de Datos Personales para limitar el flujo de información sensible hacia China. Las recientes acusaciones refuerzan su narrativa de que empresas como Meta anteponen el lucro al patriotismo, un tema candente en la agenda republicana de cara a las elecciones de medio término.

El caso se enmarca en un clima de desconfianza hacia China, exacerbado por el lanzamiento de modelos de inteligencia artificial como DeepSeek, que han puesto en jaque la supremacía tecnológica de Occidente.

Este escándalo no solo expone la vulnerabilidad de los datos americanos frente a potencias extranjeras, sino que plantea una pregunta ineludible: ¿hasta dónde están dispuestas a llegar las grandes tecnológicas por el poder y el dinero?

Para Hawley y sus seguidores, la respuesta es clara: es hora de poner freno a estas corporaciones y devolver la prioridad a la seguridad y los valores de la nación.

Envía tu comentario

Subscribe
Notify of
guest
0 Comentarios
Más antiguos
Recientes
Inline Feedbacks
Ver todos los comentarios

Últimas