Tremendo el vídeo que se ha hecho viral en todas las redes sociales demostrando que la locura del coronavirus está instalada en todo el mundo y sin remedio. En la República Checa un hombre va andando tranquilamente por la calle con su hijo, un niño que no tendrá más de dos años, y es interceptado por la Policía ya que está cometiendo el “terrible delito” de no llevar mascarilla.
Por la forma de retener al hombre, tirándole al suelo y abalanzándose sobre él, cualquiera podría llegar a pensar que se pudiera tratar de un peligroso terrorista pero no, su delito era no llevar la puñetera y asquerosa mascarilla.
Pero además, el hecho se agrava porque está con su hijo pequeño, prácticamente un bebé, que observa la escena aterrado por lo que le están haciendo a su padre sin que a los agentes les importe nada lo que pueda sucederle. Felizmente, el niño acude al resguardo de las personas que estaban presenciando la escena.
Parece que hay muchos policías por todo el mundo, y por desgracia también en España, a los que se les ha subido la tontería a la cabeza y, con la excusa del virus, van por la vida de “generales” con carta blanca para hacer lo que les de la gana y cometer infinidad de delitos abusando de su autoridad.
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Las autoridades checas dicen ahora que están investigando el asunto pero, por desgracia, la República Checa es otro de esos países que están gobernados por globalistas y que solo cumplen órdenes de quiénes les ponen el dinero, dándoles igual lo que pueda estar sufriendo el pueblo.
Fuente: eldiestro.es
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